Cuaresma en pleno julio

EN San Francisco estos días parece que los relojes hubieran querido correr para que otra vez fuera primavera y el ruán empezara a desempolvarse de los armarios para ceñirse con esparto en la cintura. Si usted se acerca hoy al templo jubilar podrá disfrutar de la siempre medida estética de Vera-Cruz, con el Crucificado tumbado bajo la Virgen de la Soledad expuesto en besapié. Y si se acerca de noche, bien creerá que estamos ante un nuevo Domingo de Pasión. A partir de las diez, la hermandad celebrará el acto de subida al paso de su titular, ese que por primera vez en la ciudad se realizó con las puertas abiertas a las que se han ido sumando posteriormente otras tantas hermandades.

La música de capilla -esas músicas de la Vera-Cruz-, la sobriedad, la elegancia, el incienso, el humo de las velas, las cosas bien hechas... todo lo que rodea al besapié extraordinario de estos días y a la subida al paso de esta noche hace pensar que estamos en una Cuaresma que la hermandad regala por su 450 aniversario fundacional.

Y a todo esto que acontecerá hoy en San Francisco se une el anuncio que días atrás hacía la también franciscana (sin título por ahora) hermandad del Caído. La corporación del Martes Santo presentaba los avances del paso del Señor, que se convertirán en su principal estreno para el año 2017; se trata del barnizado del canasto y respiraderos que ya tallara Juan Carlos García Díaz, que le dan otra impronta totalmente distinta a un paso que tiene buenas maneras y una línea interesante. Estos trabajos se están realizando en Écija (Sevilla) por el taller de Eduardo Cobalea y tendrán que rematarse en un futuro con los apliques de plata que engrosan la última fase de este nuevo paso de misterio que pasa a engrosar lo que podría denominarse el bloque del barniz, junto con Nazareno del Amor, Piedad, Perdón, Buena Muerte o Siete Palabras.

No es Cuaresma, ni mucho menos. Pero en San Francisco lo parece estos días de julio. Y con la llegada mañana de agosto no hará sino crecer esa sensación cuaresmal que nos regalan estas hermandades. A disfrutarlo.