Un partido que puede valer por una temporada

El Club Voleibol Puerto Real afronta esta tarde a partir de las 18:00 horas en su pista del Pabellón Municipal un encuentro trascendental de cara a sus opciones de ascenso a la máxima categoría, no en vano recibe al Almoradí con la posibilidad de consolidarse al frente de la tabla y prácticamente descartar a un rival directo de la pelea o, por el contrario, caer hasta la cuarta plaza, una posición que a final de Liga no dará derecho a disputar la fase de ascenso.

Tras la agónica victoria de hace dos semanas en la visita al Caravaca y el tropiezo de la anterior en Andorra, el cuadro verdiblanco marcha líder con una derrota menos que Unicaja, Almoradí y Caravaca. En las tres jornadas que faltan sólo Unicaja debe descansar. Pero el gran problema es que, en caso de empate a puntos entre los cuatro conjuntos, el puertorrealeño es el que peor parado sale por el coeficiente de sets, y no cogería ni la primera plaza, la única que da el ascenso directo, ni las dos siguientes de la segunda fase.

Mucho en juego y muchos problemas para Miguel Ángel Serrano. De hecho, el técnico sanluqueño no sabía anoche si podrá contar con Robert Oramas, lesionado en un tobillo, Nico Oroz, con gripe, y Jose Prado, que sí se ejercitó ayer aunque con fiebre.

"Si están algo mejor jugarán para contribuir aunque no sea al 100%", explica, poco convencido de que la presión del pabellón vaya a influir "ante un rival tan experimentado" y potente, del que destaca al cubano Garay, "que juega de opuesto y ha sido clave en ataque los últimos encuentros", a Pedro Miralles, "un entrenador-jugador que aporta bastante por su veteranía y experiencia" y, sobre todo, "el juego de conjunto compacto, por lo que cuesta trabajo hacerles puntos".

En la primera vuelta el cuadro de la Villa sorprendió con un 1-3, lo que, a juicio de Serrano, se convierte en un hándicap añadido. "Ellos no se lo esperaban, eran favoritos, y ahora seguro que buscarán la revancha", advierte.