La crisis salpica al Puerto Real

El CV Puerto Real está atravesando una profunda crisis económica que podría llevarle incluso a abandonar la Superliga masculina, ahora que el objetivo de la permanencia parece cada vez más cerca .

La buena racha deportiva y el apoyo de la afición, que ha acudido a los partidos en una media de 500 personas, no han podido impedir la pésima situación en la que la entidad blanquiverde se halla.

Antes de que arrancara la temporada, el club sopesó mucho la viabilidad de militar en la máxima categoría ya que eran necesarios algunos fichajes y sus respectivos sueldos, además de los de los jugadores que continuaban. Vendrían también 11 salidas con el consiguiente gasto en viajes (tres de ellos insulares) y alojamiento, entre otros muchos desembolsos como los arbitrajes. En total, el presupuesto fue fijado en 340.000 euros, según el presidente, José Mari Cantero. "Nada descabellado para donde estamos", matiza.

Hasta pocos días antes de finalizar el plazo de inscripción no se decidió definitivamente aceptar el reto después de tan meritorio camino hacia la gloria. Cantero afirma que la decisión se tomó porque "nos dijeron que tiráramos para delante que no habría problemas".

En efecto, durante el verano la euforia del ascenso a Superliga llevó a las instituciones públicas y privadas, Diputación, PSOE de Puerto Real, Zona Franca y Cajasol a prometerles unas ayudas económicas, por un total de 120.000 euros, que a día de hoy no han llegado en su totalidad, según el tesorero del club, José María Bellido.

En concreto, y siempre según el club, Diputación dio 15.000 euros y acordó aportar otros 30.000 así como lo que faltara para completar el presupuesto, y Cajasol dio 40.000 euros y también se comprometió a dar otros 30.000. Por su parte, el PSOE de Puerto Real prometió 20.000 euros y Zona Franca 10.000. Para ir tirando, el club ha utilizado los 35.000 euros de beneficio con que cerró el anterior ejercicio, pero ya no queda nada en la caja a la espera de que lleguen los ingresos pendientes desde esos cuatro frentes distintos.

Ahora, a cuatro jornadas del final, todo está ensombrecido de tal manera que ya no se ve la solución. Los jugadores acumulan dos meses sin cobrar (desde diciembre) y el club no dispone de solvencia para afrontar los pagos y seguir adelante. Así, la junta directiva ha decidido reunirse con la plantilla para "proponer a los jugadores la posibilidad de abandonar el club con total libertad" si así lo desean o por el contrario que "sigan colaborando a la espera de que se cumplan las promesas". Una vez mantenido este contacto, que previsiblemente tendrá lugar hoy, y según quede el equipo, procederán a estudiar si es viable afrontar los últimos cuatro compromisos ligueros o por el contrario es inevitable la retirada.

El mensaje a los jugadores es de "agradecimiento por todo lo que han aguantado y la profesionalidad y actitud elogiables que están mostrando". Además, les pide comprensión: "El club se ha convertido en mero intermediario y para pagar necesita antes recibir el dinero que se le prometió".

Por otro lado, en el plano de los organismos, quiere dejar claro que el club "ha intentado mantener una línea de prudencia por respeto a las instituciones y por confianza, pero dada la situación y la fecha en la que estamos nos parece que ya el respeto se lo tenemos que mostrar a los implicados: jugadores, proveedores…". "Lo que nos han pedido lo hemos hecho, como por ejemplo seguir la recomendación de ponerle al equipo el nombre de Cajasol, pero la situación es límite hasta el punto de que se está poniendo en riesgo el patrimonio personal de miembros de la junta". Así, pide que "todos cumplan lo que prometieron porque, aunque entendemos que hay una crisis económica, me parece una frivolidad que nos dejen a la deriva cuando no nos lo merecemos".

Finalmente, se dirige a los aficionados para decirles que "hemos intentado hacer las cosas lo mejor posible pero hemos dependido mucho de la ayuda de otros, lo que nos ha llevado a no disfrutar en ningún momento de nuestro año, que está siendo un via crucis".