La mirada analítica de Jerome R. Mintz retorna a Casas Viejas

"Deseo cumplido". El profesor, amigo y traductor de la obra del investigador Jerome R. Mintz, Enrique Torner, encabeza con esta aseveración uno de los textos que anteceden a la obra Las coplas de carnaval y la sociedad gaditana. Un análisis antropológico sobre la realidad de Cádiz y, sobre todo, de su amada Casas Viejas que el americano publicó en Inglaterra en 1997 y que ahora, en 2008, por fin, aparece en su edición en español.

Este "tesoro" que custodia "el mapa del tiempo" ha visto la luz a través del trabajo de la asociación benalupense Brezo y Castañuela que esta tarde, a partir de las ocho y media, presenta la "mimada" obra en la Casa Cultura de Casas Viejas, según cuenta uno de los artífices de la edición, Salustiano Gutiérrez.

"Para nosotros Mintz es el cazador cazado porque en el año 65 vino a investigar sobre los sucesos de Casas Viejas y, al final, quedó atrapado en ella, se enamoró de este lugar", narra el profesor Gutiérrez sobre el autor de la laureada Los anarquistas de Casas Viejas.

Precisamente, Mintz trabajó en el estudio que hoy se presenta de manera paralela a la preparación de la señera obra, referente en el estudio de uno de los sucesos más importantes y trágicos de la Segunda República española.

"Mintz enfermó en el 87 y ya no pudo volver a España pero durante diez años estuvo trabajando en Las coplas de carnaval...", revela el docente, que apunta cómo a través de las letrillas de Carnaval el americano -así le llamaban- "realizó un estudio antropológico de la sociedad tanto de Cádiz capital como de la geografía rural".

La obra del investigador se centra en las fiestas "de Benalup y Trebujena, sobre todo" para, después, "dedicar tres capítulos a Cádiz capital". "Del Carnaval de Cádiz, Mintz simpatiza mucho con las agrupaciones callejeras, con el espíritu libertario de la calle, mientras que critica el reglamento y las normas rígidas del Concurso de Agrupaciones", señala.

"Creo que es una obra polémica en ese sentido, pero hay que tener en cuenta que es la visión de alguien ajeno a esta realidad aunque dicen que los toros se ven mejor desde la barrera", acierta Gutiérrez.

El profesor, además de animar a los lectores a introducirse en las reflexiones del antropólogo, asegura que la edición de este libro "es la demostración de que valoramos y entendemos el amor y el respeto que Mintz sentía por Benalup-Casas Viejas" por ello "una buena manera de reconocerlo es dar a conocer buena parte del valioso legado fotográfico que también introducimos en esta obra".

De esta forma, "y gracias a la familia del investigador", el libro guarda 300 de las 5.000 fotografías que el escritor realizó en Benalup entre las décadas de los 60-70. Buena parte de ellas, se agrupan en el capítulo El Benalup de Mintz, donde se contextualiza la obra fotográfica del autor. "Además del valor académico, para nosotros esta obra tiene un gran valor sentimental. Ahí están las fotografías de nuestros abuelos", dice, emocionado, Gutiérrez.