Wicked | Crítica
Antes de que Dorothy llegara a Oz: la historia de Bruja Mala
El estreno el pasado miércoles de la segunda parte de la saga Crepúsculo, que ya está movilizando a los cines a institutos enteros en una improvisada actividad paralela, hace que este viernes lleguen dos solitarias novedades a las carteleras. Una de ellas la firma Mira Nair, la directora hindú que saltó a la fama mundial con títulos como Salaam Bombay!, La boda del Monzón o La feria de las vanidades ha sido otra cineasta más abducida por Hollywood. A ella llegó el guión de Amelia, escrito por dos ganadores del Oscar, Anna Hamilton Phelan (Gorilas en la niebla) y Ron Bass (Rain Man). Trata sobre la vida de una de las pioneras de la aviación, Amelia Earhart. En los años 20 aprendió a volar y se convirtió en una recopiladora de récords y marcas. Entre ellas, fue la primera mujer en cruzar el Atlántico volando. Su final fue triste, pues desapareció sobre el océano Pacífico en 1937 cuando intentaba dar la vuelta al mundo en avión. Nair ha contado con el concurso de la actriz Hillary Swank, de extraña carrera, pues entre Oscar y Oscar no hace películas interesantes. Además, para este film marcadamente feminista, se ha contado con el concurso de otros actores, como Richard Gere como el magnate de la prensa George Putnam, que financió sus expediciones y Ewan McGregor como Gene Vidal, otro piloto que acabó enamorándose de ella.
Russell Crowe protagoniza el thriller Tenderness, donde encarna un papel en el que parece especializarse en los últimos años, con el apoyo en el reparto de Laura Dern. Es un teniente que se enfrenta a un extraño caso de crimen y amor. En su momento detuvo a un joven que mató a sus padres. Años después, una chica problemática que sufrió abusos sexuales en su infancia se escapa para conocerlo, ya que está fascinada por su crimen. El asesino ya está en la calle y es perseguido por el teniente, ya que está convencido que que volverá a matar, pues es su naturaleza. Los dos fugitivos empiezan una historia de amor aunque él quiere matar en el fondo a su inesperada acompañante. Mientras, el policía intenta manipularla para tenderle una trampa a su insólito amado para devolverlo a la cárcel. Junto a un Crowe que ya empieza a ser veterano figuran los jóvenes Jon Foster y Sophie Traub como la pareja de delincuentes enamorados. Nada que ver con el romanticismo gótico de Crepúsculo.
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