Enrique / Montiel

Comparaciones

Calle Real

28 de agosto 2016 - 01:00

J.me habla de Chiclana, de unos restos fenicios que han aparecido en su término municipal. Los están 'endiendo como oro molido, quieren poner la ciudad en el mapa arqueológico mundial. Yo no tenía ni idea. Procuro estar bien informado de todo lo que puedo y Chiclana es para mí una ciudad muy grata donde tengo buenos amigos. No sabía nada, la verdad. Mea culpa, mea máxima culpa.

… "San Fernando tiene los hornos púnicos que son quizá los mejores conservados del mundo fenicio y ahí están, sin que los pongan en el valor que se merecen". J. es un conocido mío de la juventud, un hombre curioso, amante de la Historia antigua de esta zona. Es como lo del Castillo de San Romualdo, un convento-fortaleza del siglo XIV que sólo tiene un similar en Susa, una joya de la construcción árabe en este territorio gaditano. "En Cádiz -añade- se han preocupado más que aquí por sus restos históricos". ¿Te refieres a Teófila? Yo le pregunto con intención. No le duelen prendas reconocerlo. En el caso la verdad de lo relacionado con la arqueología y la historia puede más que sus propias convicciones e ideas políticas. El método comparativo es un método más de políticos que otra cosa. Digo que si allí lo hacen mejor que aquí, siendo lo de aquí mucho mejor que lo de allí es que allí hay mejores gestores, mejores políticos. No ha sido necesario precisar este discurso, estaba inherente. El Castillo de San Romualdo, que ni de San Fernando o de La Isla se llama, es el resultado de muchos siglos de presencia en el término municipal. J. y yo tenemos años para haber visto lo que era, con su espacio para la construcción de ventanas de aluminio, el restaurante, el reñidero de gallos y toda la mampostería habida y por haber para el albergue de los gallos de pelea, además de toda la suciedad y falta de cuidado que un sitio de tanta antigüedad y tanta historia se merecían.

J. no me habló de las defensas de La Isla y de Cádiz de 1810, pero es más de lo mismo. Están sin concluir y sin ponerla en un circuito para que vengan a La Isla a visitar este conjunto notable de una época extraordinaria de nuestra historia. Fue un encuentro de comparaciones y amarguras, de tristeza por lo realizado, por el tiempo perdido. Y eso que no hablamos de lo que ahora tiene frustrados a los restauradores de San Fernando, gente emprendedora que quieren que vengan a La Isla a degustar los productos de nuestras salinas y nuestros esteros. Y no pueden, no tienen apoyos, no tienen junto a ellos a las personas que los comprendan y se involucren en el progreso de la ciudad. Las comparaciones, ineludibles: de nuevo Chiclana. Y El Puerto de Santa María.

J. me habla de José González Barba, de todo lo que hizo con tan poco y tan poca ayuda, por no decir otras cosas -¿alguien recordará por algo bueno a la concejala del grupo andalucista que tanta daño le causó?- y se lamenta de la inexistencia en San Fernando de las élites adecuadas…

Es para hablarlo largo y tendido…

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