Un 35% de los gaditanos vive con estrecheces

¿Qué es la pobreza? Académicamente, estrechez, carencia de lo necesario para vivir. ¿Y cómo se mide? Hay varias fórmulas. Cojamos una de ellas, la que aplica la Fundación Foessa, por la cual se sitúa el umbral en 7.818 euros por persona/año porque lo que se mide es la estrechez, no la pobreza severa, lo que se conoce como privación material severa, que en 2010 en España afectaba a un 4% de los hogares, punto y medio más que en 2008, el año que estalló la crisis, el año que más ricos fuimos.

Pero no, vayamos a la estrechez, no a ese 3,1% de los hogares que no tienen ningún ingreso declarado, o esos más de 60.000 hogares de la provincia en los que nadie trabaja. Según Foessa, nuestra tasa de pobreza actual es del 21%. Sólo con ese dato, el español, estaríamos en Europa detrás de Rumanía y Letonia. Grecia tiene una tasa ligeramente inferior a la nuestra. Andalucía es la región que más pobres aporta porque Andalucía tiene una horquilla de tasa de pobreza de 30-35%. Cádiz es la provincia que, proporcionalmente, más pobres aporta a Andalucía. Uno de cada tres gaditanos, a junio de 2012, es pobre.

¿Qué es la pobreza? Jessica Ramírez, 32 años, casada, dos hijos encantadores, gaditana de La Viña, lo explicaba así: "Hemos vivido bien, teníamos para caprichos, teníamos tarjetas de crédito..." Corría 2008, cuando éramos ricos. Ahora: "Perdimos el trabajo mi marido y yo, el banco fue implacable con la hipoteca, se disparó al cuota mensual, perdimos el piso. Fuimos tirando con la ayuda familiar hasta que no se pudo más y me vi en la cola de un comedor social para coger unos macarrones y unos paquetes de galletas". Que su marido encuentre periódicos trabajos en los que cobra poco más que el salario mínimo o que ella reciba los 400 euros de ayuda familiar no les va a evitar seguir integrando ese 35% de gaditanos pobres porque con esas cantidades tendrán que hacer malabarismos para pagar alquiler, recibos de la luz estratosféricos y la deuda contraída durante su riqueza con un banco que forma parte del listado de bancos tóxicos de nuestro sistema financiero. Y, por eso, Jessica es experta en malabarismos: "Con 50 euros hago cosas ahora que antes creía imposibles. Ahorro hasta en las cosas más insignificantes".

¿Qué es la pobreza? "La situación de pobreza es, cada día, más extensa, más intensa y más crónica. Es decir, hay más personas empobrecidas, el nivel de su exclusión es más grave y la perspectiva de poder salir cada vez más lejana. El paro creciente ha hecho que muchas familias que estaban en situación de vulnerabilidad hayan pasado a situaciones de pobreza. Al perder su empleo y no poder hacer frente a los gastos de la vida diaria, familias pertenecientes a la clase media han acudido por primera vez a Cáritas a solicitar ayudas por necesidades básicas: alimentación, ropa, hipotecas, desahucios, pago de recibos de luz, agua... A estas familias hay que sumar las que, en otro tiempo, ayudó Cáritas y que lograron reintegrarse pero que de nuevo, por causa del deterioro social y económico actual, necesitan de Cáritas para subsistir". Este párrafo se encuentra en el informe balance de Cáritas Cádiz en 2011, donde ya se avisa que 2012 está siendo peor y sus recursos están al borde del colapso. Cáritas Jerez pone el empeoramiento de la situación en porcentajes. Entre 2010 y 2011 los recursos destinados a la Acogida y Asistencia se incrementaron casi en el 80%, las ayudas para ropa y calzado aumentaron en un 190%, las de gastos sanitarios, un 178% y la de suministros (agua, luz y gas) un 150%.

Esto sucede en la que, junto a Cruz Roja, es la más importante ONG que trabaja contra la pobreza y la exclusión social en nuestro entorno. Las organizaciones de voluntarios son un muro de contención contra la quiebra de la cohesión social. Pero ya son estas organizaciones las que están quebrando y, según alerta Cáritas, el muro se está resquebrajando. 365 ONG's operaban en la provincia en 2011 con 64.000 voluntarios, pero la mayoría de ellas son inviables. Las administraciones han recortado drásticamente en los presupuestos de este año sus aportaciones a los proyectos presentados. UGT cifra en un 70% el tijeretazo a las organizaciones que trabajan contra la exclusión social.

El obispo de Jerez, José Mazuelos, piensa que "los poderes públicos deberían implicarse aún más en la atención social y que Cáritas y la Iglesia tiene que trabajar más que nunca codo con codo con las instituciones para ayudar a esas personas que lo necesitan". Lo cierto es que Cáritas sólo se financia en un 21% a través de dinero público y sus campañas de captación, como la iniciativa Empresas con Corazón, no pueden enjugar el retraso de las administraciones en pagar las ayudas o su eliminación, como es el caso del convenio que la Junta de Andalucía tenía con Cáritas regional y que sólo para la Diócesis de Cádiz suponían 119.000 euros que se destinaban a personas sin hogar.

Difícilmente los programas de solidaridad de la Junta, creados en 1990 para ayudar a las denominadas rentas mínimas de inserción, podrán sustituir la sangría de dinero público para organizaciones que atienden a una población creciente de desclasados que ya no pueden esperar más a que esta crisis acabe, que ha quemado todos los recursos de reserva para los malos tiempos cuando estos malos tiempos se están eternizando. En Cádiz se concedieron en 2011 5.000 ayudas (recordemos, en la provincia hay 60.000 hogares en los que nadie trabaja), pero será difícil en 2012 igualar esta cifra. Con el presupuesto reducido, es más que probable que se denieguen muchas ayudas. Si en 2007, cuando éramos ricos, se presentaron en Andalucía 22.000 solicitudes y se aceptaron 18.000 (se denegaron 4.000); en 2011 se presentaron 50.000 solicitudes y se aceptaron 34.000 (se denegaron 16.000).

El estado de bienestar tenía como principal objetivo erradicar la pobreza. Nunca lo consiguió, pero ahora menos que nunca.