Los sindicatos agrarios llevan a la Sierra su "expropiación alimentaria"

Primero fueron sedes de partidos políticos, después las de instituciones públicas, más tarde los bancos y ayer, un supermercado. Convocados por el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) que lidera Diego Cañamero, casi 300 personas procedentes de varios pueblos de la Sierra de Cádiz y de otros municipios de la provincia de Sevilla se concentraron en el Carrefour de Arcos a las 10:30 horas de la mañana con un único objetivo: lograr lo que ellos definieron como la 'expropiación alimentaria'.

Pertrechados con banderas de ese sindicato, los participantes en este acto reivindicativo se adueñaron de hasta una treintena de carros, que llenaron hasta arriba de productos básicos de primera necesidad: arroz, garbanzos, harina,a azúcar, galletas... así hasta completar una compra que tenía por destino las poblaciones que más necesidades están pasando.

El secretario general del SAT aseguraba al inicio de la intervención que "esta es una acción protesta, una más, contra la crisis económica de nuestros pueblos, que están en una situación dramática. La gente no tiene qué comer, acude a comedores sociales, a Cáritas, a la Cruz Roja y creemos que grandes empresas como esta tienen que aportar su granito de arena".

Todos los que participaron en esta acción protesta habían llegado a primera hora a la localidad serrana procedentes de Bornos, Espera, El Bosque o Puerto Serrano, municipios de la Sierra a los que está golpeando especialmente la situación económica. Pero no sólo de la provincia de Cádiz. También llegaron desde la provincia de Sevilla vecinos de El Coronil, Utrera, Morón o Montellano. Todos compartían el mismo objetivo.

El apoyo desde las localidades sevillanas llegaba ya en la noche del pasado lunes, cuando en una asamblea celebrada en El Coronil se decidía que acudirían a la protesta en Arcos. Todos mantuvieron el secreto de la medida que iban a adoptar. De hecho, pese a que el SAT había convocado a los medios a las 10:30 horas de la mañana, no fue hasta ese momento cuando se supo cuál sería su estrategia.

Sin embargo, una vez que los carros estaban repletos, no pudieron salir de la línea de cajas. En el interior del supermercado irrumpieron varios agentes de la Guardia Civil y en ese momento se inició una larga negociación con el responsable de la tienda. La empresa dio tal importancia a lo que estaba ocurriendo que incluso tuvo que desplazarse desde Sevilla un responsable de Zona de la cadena de supermercados.

Llegó a Arcos pasadas las 12:30 horas. Diego Cañamero explicó que "de aquí no nos iremos sin los alimentos que hemos venido a buscar". Junto a él, el alcalde de Espera, Pedro Romero, asistía a la conversación. El regidor y miembro del SAT aseguró que "no vamos a robar" sino a "expropiar" productos de primera necesidad "porque la situación es dramática" para destinarlos a los servicios sociales de los ayuntamientos y al Banco de Alimentos.

Pese a que la cifra inicial planteada por los 'expropiadores alimentarios' eran 24 carros, la negativa de la cadena de supermercados hizo que se rebajaran a la mitad. Se habló de canjear bonos de alimentos, pero los manifestantes querían algo tangible que pudiera verse.

Finalmente, pasadas las 13:30 horas, hubo acuerdo. Hoy miércoles, los responsables de Asuntos Sociales de los ayuntamientos gaditanos de Puerto Serrano, Bornos y Espera acudirán a las 12:00 horas del mediodía a recoger, cada uno de ellos, cuatro carros repletos de enseres. Fue el triunfo que se festejó en el interior del supermercado.

Entretanto, las puertas de la tienda permanecían cerradas. Desde la irrupción de los jornaleros, la Guardia Civil dejó salir a quienes estaban ya dentro realizando sus compras, pero no dejó entrar a nadie más. Muchos curiosos y también vecinos de Arcos alertados por lo que estaba ocurriendo, esperaban en el exterior también como señal de apoyo.

Cañamero, al final del acto reivindicativo, recordaba que "no podemos más; la Sierra de Cádiz tiene un 40% de paro y alguien tiene que hacer algo para que la situación cambie".

En el interior se vivieron algunos momentos de tensión, como cuando uno de los manifestantes intentó comprar una barra de pan para hacerse un bocadillo e intentaron impedírselo. Muchos de los asistentes continuaron después con proclamas en contra de la crisis, alzando como enseña lo que tenían a mano: paquetes de arroz, de garbanzos o de azúcar. Esas fueron ayer sus banderas.

Y todos, también estaban pendientes de lo que ocurría en otro supermercado de Écija, en Sevilla, donde se produjo una intervención similar liderada por el alcalde de Marinaleda y parlamentario andaluz de IU, Juan Manuel Sánchez Gordillo. Tanto que incluso Twitter no paró de recibir todo tipo de comentarios acerca de esta actuación. Uno de ellos, bromeó con su figura y los Juegos Olímpicos: "Sánchez Gordillo es capaz de reventar un Mercadona en menos de 9.63 Tanto Bolt ni tanto Bolt".

El caso es que, mientras en Arcos aguardaban que dejasen salir los carros hacia sus destinos, ya sabían con seguridad que en Écija habían tenido éxito, habían logrado llevar comida a quienes más lo necesitaban.