El Gobierno descarta modificar el reparto nacional de la cuota de atún
La almadraba seguirá pescando menos que la flota industrial pese a su carácter artesanal y sostenible · Medio Marino busca otras vías para aumentar el cupo
El Ministerio de Medio Marino maneja dos opciones para incrementar la cuota de captura de las almadrabas en la campaña de 2011: la negociación con otros países como Portugal, Italia y Francia para lograr la cesión de parte de sus cupos; y la posibilidad, un año más, de que los pescadores gaditanos puedan comprar opciones de captura a otras flotas españolas. Son dos líneas de trabajo, y hay una tercera descartada de plano: la modificación del reparto nacional de la cuota de atún para dar prioridad a la flota artesanal almadrabera.
La ministra Rosa Aguilar trasladó ayer esta información a una veintena de empresarios, trabajadores y alcaldes vinculados a las almadrabas en una reunión celebrada en Sevilla. Aguilar no avanzó soluciones en firme pero emplazó a los interlocutores a una nueva cita programada la próxima semana en Madrid con el objetivo de avanzar en la gestión de la pesquería. El objetivo del Ministerio, apuntó Aguilar, es que las almadrabas puedan capturar las mismas toneladas de atún que en la última temporada: 890.
La asignación, en estos momentos, es de 636 toneladas, el 26,4% del total de la cuota española (2.410). Los almadraberos, con el respaldo político de la Junta de Andalucía, han reclamado al Gobierno que incremente ese porcentaje de captura en detrimento de la flota industrial de cerco, que se queda con el 28,3% tras el reparto impuesto en 2008, cuando empezaron las restricciones internacionales de pesca.
El reparto, según razonan los pescadores gaditanos, encierra una contradicción: se concede menos cuota a la almadraba, que se ha calado durante tres mil años sin mermar los cardúmenes de atún rojo, que a la flota de cerco, responsable de la esquilmación de los caladeros en apenas dos décadas. Los almadraberos también subrayan que su impacto socioeconómico en la población es mucho mayor que el de la flota industrial, afincada principalmente en Cataluña. La propia ministra defendió ayer estos valores, pero no está dispuesta a abrir un conflicto empresarial y con tintes políticos y regionales a cuenta del atún.
Descartada la modificación del sistema de reparto, el equipo de Aguilar se centra en la compra de derechos de pesca de otros países. En 2010 se consiguió la incorporación de 890 toneladas al total nacional mediante compra a Portugal. Gracias a este fondo de maniobra y a la adquisición de derechos a otras flotas, las almadrabas incrementaron en 220 toneladas su cupo inicial hasta las 890 toneladas. Es la estrategia a seguir en esta ejercicio, un mal menor, puesto que los empresarios de La Janda insisten en que su margen de rentabilidad se sitúa en 1.100 toneladas.
La ministra también apuntó al necesidad de elaborar un informe "científico" sobre la actividad de las almadrabas que permita defender sus intereses en la comisión internacional encargada de la conservación del atún rojo. Los empresarios gaditanos valoraron ayer "el interés mostrado" por la ministra y confían en que la próxima semana se despejen dudas sobre su futuro inmediato.
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