La perfecta estampa del jinete
Hípica La Isla celebra su VIII Concurso Jinete y Caballo que premia la corrección de indumentaria y montura acorde a la doma vaquera
Una veintena de jinetes se presentó ayer al VIII Concurso Jinete y Caballo Cortes de La Isla, que organiza la Asociación Hípica La Isla, con motivo de la Feria del Carmen. Los jueces estudiaban su indumentaria y la estampa del equino para comprobar si cumplían con las normas de la doma vaquera y puntuar posteriormente su corrección. Ganaron Paula Vila en la categoría de adultos y Tatiana Sucino en la categoría infantil.
Todos los participantes en los torneos de doma vaquera deben presentarse a la competición vestidos adecuadamente y con el caballo en perfecto estado. "No hacerlo supone la descalificación", explicaba ayer el presidente de Hípica La Isla, Manuel Rodríguez. Los jinetes, que ayer se presentaron al concurso que se celebró en el recinto ferial pasadas las cuatro de la tarde, debían ofrecer ese aspecto, y también sus caballos. "Debe tener las crines recogidas en coquitos o bien trenzadas si las tiene largas, el tupé cortado a un máximo de tres dedos, las patas y las orejas peladas, los cascos engrasados; estar limpio. Si son potros pueden tener hasta cuatro riendas; si no, dos. La cola se recoge con un nudo vaquero", detallaba poco después de los jueces ya hubieran puntuado y estuvieran a punto de dar a conocer su veredicto. Por su parte, el jinete debe llevar sombrero, un traje clásico. Si lleva pantalones con caireles tendrá que ponerse polainas, correas blancas y botín. Si lleva zahones debajo tendrá que vestir pantalón de vuelta, con correas marrones y botas altas. La indumentaria se completa con un reloj de bolsillo y pañuelo. "¿Ves? El juez le ha preguntado por el pañuelo y el chico se lo señala", apuntaba Rodríguez durante la prueba, para mostrar que los examinadores observan el más mínimo detalles. "Puede parecer que todo está bien, pero siempre miran qué les falta para puntuar", comentaba. Ayer la decisión final estuvo muy reñida, y precisamente se dirimió por esos detallitos.
En la categoría infantil se hizo con la victoria Tatiana Sucino Puerta, que consigue el trofeo y un premio de 75 euros. El segundo, Francisco Meléndez Benzo, obtiene trofeo y 50 euros. Y, finamente, Aitana Leal Reyes, tercera, se lleva el trofeo y 30 euros. Entre los adultos el primer puesto de Paula Vila disfruta de una dotación de 150 euros, además del trofeo. Andrea Sánchez logró ser segunda, y se lleva 100 euros y un trofeo. La tercera también fue una mujer, Ana del Ojo, que obtiene 75 euros y un trofeo.
Los caballistas se lucieron en el real ante el público que allí se congregó para disfrutar del concurso, al que año a año se mantiene fiel Hípica La Isla. La caseta de la hermandad del Rocío, epicentro de la actividad de la entidad en la Feria (a la espalda está el abrevadero, en un lateral se amarran los caballos y descansan los jinetes), estaba abierta atendiendo a los participantes, sus familias o los curiosos. También la del PSOE, situada enfrente, sirvió para que desde su terraza o ante ellas muchos ciudadanos observaran el proceder de los jueces. No todos los jinetes que acudieron, también había algunos enganches, se inscribieron. "Saben que deben venir perfectos para conseguir algo", matizaba el Manuel Rodríguez.
En el recinto ferial pocas casetas estaban abiertas, aunque alguna había, como la de la peña carnavalesca Con sabor a cañaílla o No ni ná, que presentaba un aspecto envidiable, que se ha repetido a lo largo de las fiestas.
La Feria se despidió, por el fuerte viento, sin fuegos artificiales.
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