La estiba mantiene el diálogo bajo otra convocatoria de huelga

Crisis en los puertos

Los sindicatos registran un nuevo preaviso para cesar la actividad en los puertos nueve días de marzo. De la Serna insiste en la urgencia del decreto para evitar la sanción de Bruselas

Estibadores del mundo muestran su apoyo a los españoles en Algeciras
Texto: Alberto Rodríguez / Vídeo: Jorge Del Águila

21 de febrero 2017 - 18:58

El diálogo sigue en pie pero el tiempo apremia. Los sindicatos y la patronal de la estiba retomaron ayer en Madrid las conversaciones sobre la reforma del sector con una primera cita que se saldó sin grandes avances y con una nueva convocatoria de huelga sobre la mesa. El Gobierno ha encomendado al presidente del Consejo Económico y Social (CES), Marcos Peña, ejercer como mediador en esta nueva ronda que tiene, por el momento, el próximo viernes 24 como límite para alcanzar un acuerdo.

El sindicato Coordinadora salió de la reunión, celebrada en la sede del Ministerio de Empleo, con el anuncio de un nuevo preaviso de huelga para nueve jornadas alternas que se harán efectivas entre el 6 y 24 de marzo si el Ejecutivo valida dentro de dos días sin cambios el real decreto-ley para reformar esta actividad.

Bajo la presión de una huelga en ciernes, hoy seguirán los contactos entre las partes. El negociador del CES se reunirá desde las 8:30 con los sindicatos Coordinadora, UGT y CCOO, así como con la patronal Anesco por separado. Luego está prevista una nueva sesión de mediación conjunta a partir de las 16:00.

El Gobierno, por su parte, insistió en la urgencia de aprobar el decreto para evitar una multa de Bruselas y situó el texto como punto de partida para su posterior debate en el marco de la negociación colectiva, lo que supone de forma tácita mantener en pie la jornada del próximo viernes 24 como fecha prevista para la aprobación del real decreto-ley en el Consejo de Ministros.

La primera jornada de la ronda negociadora apenas duró un par de horas y no estuvo exenta de tensiones. Coordinadora criticó que los sindicatos CCOO y UGT fueran invitados a la reunión apenas dos horas antes de su inicio y luego afearon la ausencia de un representante del Ministerio de Empleo. No estuvo la ministra Fátima Báñez ni ningún alto cargo del departamento pese a que el ministerio se ofreció la semana pasada para mediar.

El coordinador general de Coordinadora, Antolín Goya, censuró que en lugar de representantes del Gobierno se encontraran con un mediador que, apuntaron, carece de capacidad para incidir en el articulado del decreto. Ese hecho les ratificó en la decisión de tramitar el nuevo preaviso de huelga y a reclamar para hoy la presencia de cargos de Empleo que puedan influir e introducir cambios en el texto legislativo antes del viernes.

De lo contrario, los paros se desarrollarán durante tres semanas a razón de tres días alternos por semana y, al igual que los anteriores que fueron desconvocados, en horas alternas. Los días registrados son el lunes, miércoles y viernes, lo que abarca a las jornadas del 6, 8, 10, 13, 15, 17, 20, 22 y 24 de marzo en sus horas impares.

"Evidentemente, le hemos pedido a la mediación que transmita al Gobierno que, mientras estemos en proceso de negociación, no se lleve adelante el decreto y que haya un plazo que dé suficiente tiempo a las partes para negociar. Es solamente la presentación de un preaviso y si no se presenta el decreto y se llega a un acuerdo, estamos en perfectas condiciones para no ejecutar el derecho a huelga y no llevarla adelante", dijo Goya.

La patronal Anesco lamentó el preaviso de huelga a través de su director gerente, Pedro García Navarro, quien enfatizó que los empresarios sí aceptan al mediador designado por el Ejecutivo. Anesco dijo estar dispuesta a negociar a fondo aunque denunció que el bajo ritmo de actividad continúa en muelles como los de Valencia, Alicante y Cádiz con una caída de la actividad que cifraron en el 23%.

"La asociación empresarial espera que los representantes de los trabajadores reconsideren su posición, demostrando su voluntad de dialogar, ante las graves consecuencias que tendrá esta actuación para toda la economía nacional. Los empresarios pretenden, en el seno de esta negociación, poner el acento en la continuidad del empleo, el respeto a la preservación de los derechos adquiridos por los trabajadores de la estiba, en la formación y la prevención de riesgos laborales", sostuvo la entidad en un comunicado emitido tras la reunión.

Mientras se producía la primera cita de la nueva ronda negociadora, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, aseguró durante la sesión de control al Ejecutivo en el Senado que "hay tiempo más que suficiente" para modular los efectos del decreto mediante la negociación colectiva.

Interpelado por Ferrán Martínez (Unidos Podemos), De la Serna remachó que urge la aprobación del decreto para evitar una sanción millonaria de la Unión Europea cifrada en 134.000 euros diarios. "Cuando llevemos 500 ó 1.000 millones de euros, quizás le entre el sentido común", replicó al senador. El ministro destacó que el texto da garantías de estabilidad laboral y plantea un año para adaptar los convenios colectivos así como un periodo de tres para su aplicación total. "Hay tiempo para el diálogo. Pero no hay tiempo para la sentencia", urgió.

En su intervención, De la Serna no avanzó si aplazará de nuevo la aprobación de la reforma ante el Consejo de Ministros, lo que abrirá un plazo de un mes para su convalidación o rechazo por parte del Congreso de los Diputados. Por el momento, ninguna formación política ha mostrado su apoyo a los planes del Gobierno.

El diputado socialista Salvador de la Encina reclamó al Ejecutivo del Partido Popular que se tome en serio la negociación en declaraciones a este Diario. De la Encina remachó que el Gobierno tiene en su mano evitar un "terrible perjuicio" a la economía si se llega a la huelga. "Mientras siga la negociación, hay esperanza", concluyó el diputado.

stats