Juan Marín pide a los madrileños con residencia en Andalucía que se queden en casa por el coronavirus

El vicepresidente de la Junta, Juan Marín, ha expresado este viernes un malestar que también es patente en los centros hospitalarios de Andalucía. Desde que la comunidad de Madrid suspendió las clases y se alertó a la población de la alta tasa de incidencia del coronavirus en la región, muchos madrileños se han desplazado a distintas poblaciones andaluzas donde cuentan con segundas residencias o con familiares. Lo que les ha pedido Marín es que se recluyan en sus casas, que guarden las mismas precauciones que si estuviesen en sus domicilios habituales. Este factor puede alterar los escenarios que estaban previstos para Andalucía, cuyos servicios sanitarios están ganando unos días de oro, y de relativa calma, respecto a lo que viene ocurriendo en Madrid, La Rioja y el País Vasco.

En un tono de enfado, Juan Marín ha intervenido esta mañana en un programa de Antena 3, cuya principal preocupación sobre Andalucía se centraba en la posible suspensión de las procesiones de Semana Santa. Y esto es lo que ha explicado el vicepresidente: "Nuestros servicios sanitarios nos están diciendo que están atendiendo a personas desplazadas desde Madrid a Andalucía, lo que pedimos es que esas personas que vienen que, por favor, se queden en su casa, que no vengan a salir a la calle y, si tienen síntomas, que acudan a los teléfonos que se han habilitado en Andalucía".

En Andalucía hay 219 casos positivos, de las cuales 90 están en su domicilio, el resto en hospitales y cinco de éstas, en salas de cuidados intensivos.

Juan Marín ha señalado una preocupación que ya era patente en los responsables de Salud de la comunidad. Los hospitales públicos andaluces vienen trabajando desde hace dos semanas con diferentes escenarios, el más grave sería el de una situación similar a la de Italia. Aunque el primer caso de contagio original se dio en Sevilla, con un paciente ingresado en el Virgen del Rocío dado ya de alta, la tasa de infectados por el virus se ha contenido en todas las provincias, lo que está dando bastante tiempo a los hospitales a preparase. Hay planes para ampliar las camas de UCI, si fuese necesario, y se han establecido medidas para proteger al personal sanitario, que es un elemento clave en esta crisis.

Sin embargo, la afluencia de personas que viven, habitualmente, en Madrid puede descomponer estos planes preventivos. La afluencia de madrileños es evidente en las zonas costeras de Cádiz, Málaga y Almería, en las urbanizaciones que suelen llenarse en Semana Santa y en verano.

Ésta es una diferencia entre los modos de proceder de China y Corea del Sur contra la epidemia y los de España e Italia. Las primeras acciones del Gobierno chino fueron la reclusión de los habitantes de varias ciudades afectadas por el virus, especialmente en Wuhan, pero en Italia se tardó en blindar el norte y, cuando se decretó, hubo tantos viajes hacia el sur que el Ejecutivo de Conte tuvo que extender el confinamiento a todo el país. En España, el Gobierno central aún no se ha planteado cerrar la comunidad de Madrid, un blindaje que traería graves consecuencias económicas y supondría un hecho de máximo impacto. La Generalitat sí ha cerrado cuatro municipios barceloneses en torno a Igualada. Y el Gobierno vasco acaba de aprobar este viernes el el estado de emergencia sanitaria, lo que le permite proceder del mismo modo.

El vicepresidente de la comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, ha solicitado al Gobierno central que estudie este confinamiento de la población, una medida, que por su gravedad y difícil operatividad, sólo podría tomarla desde Moncloa. Aguado, de Ciudadanos, del mismo partido que Juan Marín, lo ha declarado en una entrevista en TVE1.