Hoja de ruta desde Andalucía para reducir la huella de carbono
JORNADA GRUPO JOLY-AQUALIA
Grupo Joly y Aqualia organizan una jornada técnica en la que la gestión eficiente del agua, la economía circular y la huella de carbono fueron los ejes vertebradores
El agua es el recurso más apreciado del planeta, vital para el ser humano. Cada vez preocupa más su gestión a la sociedad y la necesidad de hacer un buen uso de los recursos hídricos es objetivo primordial tanto de las administraciones como de la industria y las empresas. No hay que olvidar que la industria es el segundo gran consumidor, por detrás de la agricultura, por lo que la eficiencia y el buen uso del agua se hace indispensable.
Partiendo de esta base, Grupo Joly y la empresa Aqualia organizaron este martes en el Hotel NH Collection de Sevilla la Jornada Técnica titulada La sostenibilidad ambiental en Andalucía: midiendo el cambio climático, en la que la gestión eficiente del agua, las emisiones de gases y la huella de carbono fueron los ejes vertebradores. Representantes de la administración pública y de empresas expertas en la materia hablaron y debatieron sobre la huella de carbono y cómo ésta se puede calcular para caminar juntos hacia la descarbonización o la neutralidad energética (emisiones cero) de la industria.
Moderada en todo momento por la asesora de Transformación Digital de Grupo Joly, Magdalena Trillo, la jornada contó en la inauguración con las intervenciones del director general de Grupo Joly, Tomás Valiente (quien señaló que “con esta jornada contribuimos a la concienciación de la importancia que tiene la sostenibilidad medioambiental”);el director nacional de Aqualia, Santiago Lafuente, el presidente de la Asociación de Abastecimientos de Agua y Saneamientos de Andalucía (ASA Andalucía), Pedro Rodríguez; y de la viceconsejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Ana María Corredera.
El director nacional de Aqualia realizó un recorrido por la trayectoria de la empresa, pionera en la medición de la huella hídrica y en activar medidas de sostenibilidad desde el año 2006. Lafuente recordó que “en Almería llevamos 30 años trabajando en la reducción del consumo hídrico, consiguiendo reducirlo en un 47% y controlando cada litro de agua”, y destacó que “el plan estratégico que tenemos en Aqualia es muy práctico, con objetivos integrados y priorizando el uso de energías alternativas. Se centra en cinco líneas de actuación: emergencia climática, personas, tecnologías, impacto social y la ética”.
Por su parte, el presidente de la ASA Andalucía, Pedro Rodríguez, puso el acento en la importancia de la gestión eficiente de los recursos hídricos ante la situación que vivimos e estrés hídrico o sequía. Según los datos que maneja su asociación, en el agua de abastecimiento se pierde entre un 25-30%, “un agua que se va sobre todo porque las redes están deterioradas por el tiempo”, por lo que reclamó financiación e inversión para actualizar las instalaciones hídricas. “El agua debe estar prioritariamente en la agenda política”, incidió.
El reto: 2.500 millones en materia de agua
Por su parte, la viceconsejera de Desarrollo Sostenible Ana María Corredera hizo hincapié en los hitos logrados en la legislatura de Juanma Moreno, como poner en pie el Pacto Andaluz por el Agua y la Ley andaluza de Cambio Climático, y la próxima aprobación de la Ley de Economía Circular. “Hasta hoy hemos movilizado en torno al agua 1.500 millones de euros. El reto del presidente para esta legislatura es activar 2.500 millones”, anunció Corredera.
Tras estas intervenciones, se abordó la lucha contra el cambio climático desde la perspectiva de las empresas, a través de la ponencia de Daniel García Lázaro, ingeniero y director general de Ecoterrae, consultora especializada en sostenibilidad y cambio climático, creadora de la aplicación Huella de Carbono, una herramienta útil para medir el impacto ambiental. Según el empresario, “las empresas cada vez están más concienciadas y forma parte de su RSC el tener proyectos de absorción de CO2. La movilización de fondos ligados a la sostenibilidad como los Next Generation ha propiciado esto. Y el sector del agua es uno de los que ha comenzado a calcular su huella de carbono”, señaló.
La directora general de Calidad Ambiental y Cambio Climático de la Junta de Andalucía, María López, avaló esta realidad, señalando que ya hay 17 empresas en Andalucía que han registrado su huella de carbono. Durante su disertación, López expuso al detalle el Plan Andaluz de Acción por el Clima. “Hemos actualizado el sistema andaluz de compensación de emisiones (SACE). Los proyectos de compensación van a ser el futuro para la industria: todo aquello que no puedo reducir lo compenso”.
En la segunda parte de la jornada, José Magro, gerente de sostenibilidad de AENOR, explicó con detenimiento la Nueva norma de gases de efecto invernadero ISO 14064 y abordó las oportunidades que la descarbonización ofrece al tejido empresarial. Magro considera fundamental “el cambio que se ha producido en la financiación. En el momento que se le puso precio al carbono en el año 2005, todo cambió. Y hace unos 3-4 años ha habido un cambio fundamental: todo lo que se va a financiar va a estar supeditado sí o sí a esta lucha contra el cambio climático”.
A continuación, se analizó a fondo cómo se gestiona la huella de carbono en Aqualia, con la ponencia de Enrique Hernández, director de Sistemas de Gestión, Sostenibilidad y Riesgos de esta empresa. Para Hernández, “Andalucía es a comunidad que mejor lo está haciendo metodológicamente desde el punto de vista de las empresas, alineada con los objetivos de sostenibilidad nacionales y europeos”.
Posteriormente, su compañero Lucas Díaz, director de Aqualia en Andalucía recordó que desarrollan más de 12 proyectos de innovación focalizados en garantizar la sostenibilidad, y repasó algunos casos de éxito de economía circular como son el Proyecto All-Gas en Chiclana (tratamiento de algas residuales con microalgas y bacterias), o el proyecto Zeppelin en Algeciras (producción de hidrógeno verde a partir de aguas residuales y lodos).
Cerró la sesión el secretario general de Medio Ambiente de la Junta, Sergio Arjona, que insistió en la idea final de que “la sostenibilidad cada vez está más presente en el ámbito empresarial y también la Junta debe estar alineada para contribuir a estos objetivos”.
Un documento pionero en España
Andalucía se ha posicionado como la primera comunidad española en aprobar una planificación acorde con la nueva Ley estatal de cambio climático y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. Así lo recordó durante su ponencia la directora general de Calidad Ambiental y Cambio Climático de la Junta, María López Sanchís, quien ha pilotado en primera línea la puesta en marcha este importante documento.
El Plan Andaluz de Acción por el Clima (PAAC) se formuló en enero de 2020 y fue aprobado en el Boja 13 octubre de 2021, y fija las políticas de cambio climático de la Junta para la próxima década, estableciendo como objetivo la reducción de emisiones en un 41%. Como explicó López Sanchís en la jornada, “este Plan constituye el instrumento de planificación de las políticas autonómicas en materia de cambio climático. Tiene contempladas 112 actuaciones, muchas de ellas ya se están poniendo en marcha, sobre todo, las relativas a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca”.
Para la directora general, la economía circular es una palanca importante contra el cambio climático, “por eso es fundamental que desde las administraciones demos a conocer el problema, pero también la percepción de qué podemos hacer entre todos. Si cada uno de nosotros recicla nuestros residuos en casa, evitaremos que esos residuos acaben en un vertedero emitiendo metano. Esto es una cuestión transversal y multidisciplinar. Es cuestión de muchas medidas pequeñas entre todos”, matizó.
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