La primera mujer que gobierna Andalucía
Investidura de Susana Díaz
Susana Díaz comparte con todos sus antecesores sus estudios de Derecho, pero no es la más joven en acceder al cargo: Escuredo (35) y Borbolla (37) la superan.
Sevilla/Susana Díaz se ha convertido, tras una carrera institucional meteórica, en la quinta presidenta de la Junta de Andalucía y la primera mujer que ocupa este cargo en los 31 años de autonomía, periodo en el que sólo han gobernado los socialistas -en solitario o en coalición- en esta comunidad.
Tras apenas dieciséis meses como consejera de la Presidencia e Igualdad en el gobierno de José Antonio Griñán, a quien sustituye después de que el pasado julio anunciara su dimisión, Díaz accedió a la política andaluza de la mano de su antecesor, ya que hasta ser elegida secretaria de Organización del PSOE-A su trayectoria estuvo centrada en el ámbito local y, casi siempre, en puestos orgánicos.
El nuevo gobierno que presidirá Díaz, que tomará posesión de su cargo el próximo sábado, tiene como reto más inmediato el diseño de los presupuestos de la comunidad autónoma para 2014, que deberán ser remitidos al Parlamento antes de que finalice octubre y que seguirán marcados por los recortes.
A punto de cumplir 39 años, la sevillana Susana Díaz deberá afrontar otros retos a medio plazo y demostrar que su intención, reiterada hasta la saciedad, de abrir un "nuevo tiempo" en Andalucía es algo más que un eslogan, y que será "implacable" con la corrupción, tal y como ha asegurado en su discurso de investidura, en el que anunció una treintena de medidas para la regeneración política.
Menos dificultad, en principio, se augura respecto a la marcha del pacto de coalición PSOE-IU, dado que ha sido la propia Díaz la que desde el inicio de la legislatura se ha ocupado personalmente del seguimiento del acuerdo, que incluye 250 medidas y 27 leyes, si bien la federación de izquierdas ya ha expresado la intención de "refrescar" su contenido.
Aunque es la primera presidenta de la historia de Andalucía, Díaz no es la más joven que ocupa este cargo, ya que José Rodríguez de la Borbolla, que también accedió al puesto tras la dimisión de su antecesor, tenía 37 años, y Rafael Escuredo fue nombrado con 35.
Como ellos -y también como Manuel Chaves y José Antonio Griñán-, la nueva presidenta es licenciada en Derecho por la Universidad de Sevilla, aunque no ha ejercido actividad en este ámbito, algo que le achacan sus detractores, que subrayan que toda su vida profesional ha estado ligada a la política.
Acostumbrada a la contienda política desde Juventudes Socialistas, muy hábil para la negociación y con contundencia en sus mensajes, el primer cargo público que ocupó fue el de concejal del Ayuntamiento de Sevilla de 1999 al 2003, con sólo 25 años, mandato tras el cual fue elegida diputada al Congreso, entre el 2004 y el 2008, y posteriormente y hasta la fecha, parlamentaria en la Cámara andaluza y consejera de la Presidencia e Igualdad.
Ha sido secretaria de Organización del PSOE de Andalucía hasta el 2012, y actualmente es la secretaria general de la potente agrupación socialista sevillana.
A Díaz se le atribuye haber pilotado con éxito la sucesión de Manuel Chaves por José Antonio Griñán en la dirección del PSOE andaluz tras las primeras tensiones de bicefalia política, situación que se repite en esta nueva etapa, en la que su antecesor al frente de la Junta mantiene el cargo de secretario regional del partido aunque está previsto que antes de enero se celebre el congreso en el que le cederá el testigo.
Susana Díaz ha sido la primera candidata del PSOE a la Junta elegida en unas primarias y, a pesar de que el proceso no se completó al no llegar a las urnas por falta de avales de sus contrincantes, su victoria fue indiscutible, con casi la mitad de avales de la militancia.
El desempleo, la crisis y la corrupción serán los grandes problemas a los que se enfrentará en los dos años y medio que restan de legislatura, si es que decide agotar este mandato.
Susana Díaz, que fue catequista en su primera juventud y ejerce de bética y trianera (barrio por el que paseó en coche de caballos en su boda), está casada y no tiene hijos.
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