Tribuna Económica
Fernando Faces
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La llegada de un crucero turístico en la noche de hoy al puerto de Cádiz ha cogido de sorpresa a los escasos viandantes que paseaban por la zona, teniendo en cuenta que se había anunciado la prohibición para la llegada de buques turísticos mientras que se mantuviese la alerta por el coronavirus.
El buque se apoyó en las limitaciones de la orden de la autoridad portuaria por la que se permitía el atraque de cruceros hasta las doce de la noche de este domingo, siempre y cuando desembarcase todo el pasaje.
Esto es lo que pasó esta noche. El barco, el Sovereign, llegó con 1.888 turistas, la mayoría brasileños, procedente de Santa Cruz de Tenerife. Aunque no estaba Cádiz dentro de sus escalas, pidió en la noche del viernes autorización para su atraque, con la obligación de que todo su pasaje abandonase la ciudad una vez desembarcados. Fuentes de la APBC indicaron que todos se iban a trasladar a Lisboa a bordo de autobuses.
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