El Ayuntamiento de Cádiz aumenta el número de plazas de zonas verdes en el casco histórico

Un vigilante pasea por la zona del hospital de San Rafael, entre las líneas verdes de los nuevos estacionamientos. / Jesús Marín

El Ayuntamiento de Cádiz ha anunciado que sumará 54 plazas al número de aparcamientos regulados a lo largo de los próximos días, todas ellas en el casco histórico de la ciudad. Algunas vendrán a compensar la pérdida de plazas de zona verde que se perderán tras la cesión a algunos hosteleros de la ciudad que han solicitado esos espacios para poder colocar sus terrazas y así poder paliar las pérdidas económicas que le sobrevienen a causa de la crisis motivada por el coronavirus.

El concejal de Urbanismo, Martín Vila, fue el encargado de dar a conocer esta modificación aprobada esta mañana durante la última Junta de Gobierno Local. El propio Vila justificó que parte de este aumento de plazas de estacionamiento regulado viene motivado por la cesión de varias plazas de aparcamiento, hasta ahora de zona verde, a varios hosteleros que han pedido esos espacios para el objetivo citado. Concretamente uno de los establecimientos que así lo ha solicitado de manera formal se ubica en la calle Pericón de Cádiz, otro en la calle José García Agulló y otro establecimiento hostelero situado entre las calles Trille y María Auxiliadora.

Esta cesión supondrá una merma en el número de plazas de estacionamiento regulado contemplado por el Emasa, que alcanzaba las 700 plazas, 600 de ellas ubicadas en el casco histórico o bien para zonas azules, verdes o naranjas. La intención del Ayuntamiento es compensar esta merma con la suma de esas 54 nuevas plazas de zona verde en distintas calles del casco históricos que aún faltaban oor regular, según el responsable municipal del área de Urbanismo y Movilidad Urbana.

Concretamente serán 18 nuevas plazas, todas ellas en la calle Hércules, que hasta ahora eran de estacionamiento libre, o sea para cualquier ciudadano fuera o no fuera residente de esa zona de la ciudad.

Martín Vila insiste en que esta ampliación responde en buena medida a la petición realizada desde distintas asociaciones de vecinos que piden que sus espacios para el estacionamiento de vehículos pasen a ser zonas verdes y, por lo tanto, queden a expensas de que los vecinos adquieran la tarjeta de residente previo pago de la tasa anual correspondiente.

A estas 18 se sumarán otras 36 plazas en zonas actualmente reguladas como zonas de carga y descarga, "de manera que cuando acabe el horario de carga y decarga pasarán a ser zonas verdes". Es lo mismo que pasan, según recuerda Martín Vila, en otras zonas de la ciudad como varias calles perpendiculares al Paseo Marítimo de la capital.

Estas plazas de carga y descarga que se tornarán en zona verde se repartirán entre la calle Matías (3 plazas), calle Martínez Campos (13 plazas), calle San Francisco Javier (3 plazas), la calle Alcalá Galiano (10 plazas) y en la plaza del Mentidero (7 plazas).

Esto demuestra, según Martín Vila, "la capacidad de este Ayuntamiento de adaptarse en cada momento a los intereses de los propios ciudadanos", a lo que ha querido sumar el reconocimiento a la buena acogida por los vecinos de la ciudad a este nuevo sistema de estacionamientos regulados que ha permitido a muchos vecinos poder volver a aparcar cerca de sus domicilios.

Pago de la anualidad de la tarjeta de residente

El Ayuntamiento ha pasado al pago la anualidad de la tasa para obtener la tarjeta de residente que permite a los vecinos afectados aparcar en sus zonas verdes o naranjas. De momento el cobro ha sido ya pasado al pago bancario, a pesar de que aún no han sido remitidos a los domicilios de los interesados la tarjeta o pegatina que debe lucir el vehículos como prueba del pago.

De todas formas, desde Emasa aseguran de que esto se debe al aluvión de solicitudes que aún se tramitan y aseguran que los vigilantes de estas zonas verdes y naranjas tienen la orden de no multar aunque la pegatina que luzca el vehículo haga mención al período de 2020.