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El equipo de Gobierno va a pedir en el próximo pleno municipal del mes de febrero autorización para solicitar el crédito de 42 millones con el que afrontar la obras de la grada de tribuna del estadio Ramón de Carranza. Esto significa que desde el Ayuntamiento no se va a esperar más tiempo a la Zona Franca de Cádiz y se va a iniciar el proyecto en solitario.
Así se lo comunicó en la mañana de ayer la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, al presidente del Cádiz, Antonio Muñoz, en una reunión que mantuvieron en el Ayuntamiento gaditano.
El compromiso inicial era que las obras se iniciaran en el mismo mes de enero, pero lo más previsible es que hasta que no termine la temporada no se pueda comenzar con el derribo de la grada principal. Así, una vez que pase por el trámite del pleno, el equipo de Gobierno tiene que pedir autorización a la Junta de Andalucía, que tiene que ver que cumple con los requisitos financieros. En este sentido, no tendrá problemas, ya que el interventor municipal ha establecido que el Consistorio tiene aún un margen de 47 millones para pedir créditos. En el momento en el que se dé el visto bueno, al día siguiente se inicia la licitación del proyecto, tal y como dijo Teófila Martínez, proceso para el que se tarda cerca de dos meses hasta la adjudicación definitiva.
La obra tiene en principio una duración de 24 meses, aunque desde el Ayuntamiento se va a premiar la reducción de tiempo. El principal problema que se plantea es que es prácticamente imposible tener a tiempo la obra para la celebración del centenario del club, que se debe producir a mediados del próximo año. Tanto Teófila Martínez como Antonio Muñoz coincidieron en decir que habrá que reajustar las fechas para que comience un poco más tarde el centenario y programar los actos para que la ejecución de los trabajos tengan una mínima incidencia. La alcaldesa también aseguró que la prioridad máxima será la de tener a punto el graderío y poder abrirlo lo antes posible, aunque luego se siga con el resto del proyecto.
Mientras tanto, el Ayuntamiento va a seguir trabajando con el Cádiz en la reubicación y el proyecto de los vestuarios provisionales en la grada de Fondo Norte, y en la de los palcos de tribuna en las tres nuevas. Antonio Muñoz decía ayer de manera irónica que los que van a salir ganando este año son los socios de tribuna "que van a estar toda la temporada en esta grada pagando a precio de preferencia", ya que el traslado estaba previsto para enero.
Teófila Martínez aseguró que mientras que llega el derribo o en el mismo inicio de la obra, la Zona Franca puede cambiar de opinión y entrar en el proyecto adquiriendo los locales comerciales y el espacio para el hotel. No obstante, el Ayuntamiento hará gestiones con otras empresas.
Martínez recordó que hay firmado un convenio marco con la Zona Franca "pero que no se crean que eso es nada más que para participar sólo en lo que ellos quieren".
La alcaldesa señaló que mientras que el PSOE asegura que la obra no es prioritaria, "para nosotros es necesaria". En este sentido afirmó que se espera que durante los trabajos haya una media de entre 120 y 130 operarios en la obra, por los 80 que hubo en Fondo Norte y los 150 de Fondo Sur y Preferencia.
Asimismo, con respecto a las dudas del coste del proyecto total, la alcaldesa señaló que "nosotros no hemos construido sólo un estadio, sino un edificio administrativo y comercial que alberga un campo de fútbol en su interior y eso es bastante más caro". Además, recordó que la inversión que se haga se recuperará con la venta de los locales.
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