Cádiz envejece con rapidez y buena parte de la población supera ya los 50 años

No hay que asustarse. Nos consuelan advirtiéndonos de que esto mismo que está pasando en Cádiz y en los principales barrios de su casco histórico está ocurriendo en 19 de los 27 estados de la Unión Europea. Estos están en situación de despoblamiento y ocho en situación de despoblación y de despoblamiento.

El envejecimiento de la población afecta a todos casi por igual y uno de cada cinco habitantes de la UE tenía 65 años o más en 2021, un porcentaje válido también en España.

Todos estos datos están recogidos por el estudio sociodemográfico del municipio de Cádiz presentado en días pasados y encargado por la empresa municipal de aparcamiento Procasa, dependiente del Ayuntamiento de Cádiz. En la puesta de largo del estudio participaron los concejales de Vivienda y Urbanismo, Eva Tubío y Martín Vila, respectivamente, además de dos representantes del equipo de Ibermad, Alejandro Muñoz y Juan José Caro. Iván Román Pérez-Blanco, Julia Mendoza, Antonio Barbosa y Pilar Sanz conforman el resto de autores del estudio encargado por Procasa.

Cádiz es la capital de provincia en España que más población ha perdido, tanto en términos absolutos como relativos, unos 20.000 habitantes de 2001 a 2021.

El estudio deja un espacio importante al nivel inframunicipal, donde se deja claro que la mayor pérdida absoluta de población se produce en Extramuros, aunque indica que en términos relativos es el casco histórico donde se detecta una mayor reducción de habitantes.

Los distritos que han reducido más su población, según el informe son los distritos 9 (San José, Residencia, Barriada de La Paz) y 10 (Paseos Marítimo, La Laguna, Cerro del Moro, Puntales y Loreto) ambos en extramuros, al ser los distritos más poblados.

En términos relativos es el distrito 4, o sea, la zona de La Viña, es el que más ha perdido población (más del 30% de sus efectivos en los últimos 23 años) “en un proceso de despoblamiento que se intensifica en el pasado período 2011-2021. Esa pérdida poblacional afecta especialmente al grupo de edad comprendido entre los 15 y los 19 años.

Esta pérdida poblacional de Cádiz ha favorecido una reducción de la densidad poblacional que, según el informe, “era y sigue siendo una de las más altas de España”.

Cabe recordar que la densidad de población urbana de Cádiz ha pasado de más de 33.000 habitantes por kilómetro cuadrado a 29.000 en 2021.

Un dato sociodemográfico importante es que la diferencia entre el número de nacimientos y defunciones (crecimiento vegetativo) desde 1988 y 2021 ha dejado un saldo negativo, con 43.316 defunciones y sólo 37.415 nacimientos, arrojando una diferencia de -6.000 habitantes.

En este proceso de despoblación hicieron un flaco favor el saldo negativo en los movimientos migratorios registrado entre 1988 y 2021, siendo especialmente grave en la década de los 90 donde este saldo negativo alcanzó los -18.211 habitantes.

En estos movimientos migratorios los grupos de población entre los 15 y los 29 años y entre los 30 y los 44 años, que representan el 74,7% de la pérdida poblacional atribuida a las migraciones.

El estudio socio demográfico del municipio de Cádiz encargado por Procasa y elaborado por Ibermad, destaca que los distritos que han reducido más su población en número absolutos son los distritos 9 (San José, Residencia, Barriada de la Paz) y 10 (Paseo Marítimo, La laguna, Cerro del Moro, Puntales y Loreto), ambos de Extramuros.

En Intramuros, según el informe hecho público a lo largo de esta semana pasada, el distrito que ha decrecido más en términos absolutos es el distrito 4 (La Viña), asociado históricamente a zonas con un mayor número de habitantes en precariedad laboral, infravivienda y menor presencia de equipamientos públicos. Si se tiene en cuenta la evolución de la población en términos proporcionales, aparece un escenario distinto que aporta una imagen más detallada de la dinámica demográfica reciente de la ciudad.

De todas maneras, si en términos absolutos, los distritos que más población han perdido son los distritos 9 y 10, es decir San José, Residencia, Barriada de La Paz y el Paseo Marítimo, en términos relativos es el distrito 4, el de La Viña, el que más población perdió, con una disminución del 30% de sus efectivos desde inicios de este siglo, intensificándose este proceso en los diez años comprendidos entre 2011 y 2021.

Entre el resto de los distritos, ningún tuvo una pérdida superior al 20% de su población, siendo el distrito 9, es decir el de San José, Residencia y La Paz, los que siguen a La Viña.

Destaca el documento el comportamiento de los distritos 3 (barrio del Balón y del Falla) y 6 (San Juan, Candelaria y El Pópulo) que llegaron a frenar su decrecimiento de manera importante en la última década, posiblemente, según el estudio de Ibermad “como resultado de las actuaciones de rehabilitación edificatoria y renovación urbana que han propiciado el asentamiento de población en las viviendas rehabilitadas en dichos barrios”.

A pesar de que la densidad de población urbana de Cádiz sigue siendo superior en extramuros se da la circunstancia de que en el casco histórico sigue bajando en las últimas décadas. Aún así, los distritos donde se alcanzan las densidades más elevadas se localizan en el centro de la ciudad destacando el distrito 5 (Callejones y Hospital de Mujeres) , el distrito 4 (La Viña) y el distrito 7 (Santa María), que resulta que son también, según destaca el informe, “las zonas con la población más desfavorecidas y vulnerable”.

El informe sociodemográfico elaborado por Ibermad destaca el hecho de que si dentro del marco de las sociedades modernas desarrolladas es ya normal la tónica del aumento de la tasa de la mortalidad y la disminución de la de natalidad, si en el resto del mundo esto ha comenzado a detectarse allá por 2018, en Cádiz viene siendo ya un proceso que se inició, ni más ni menos, que dos décadas antes, en 1994. De hecho, en el ámbito nacional, Cádiz es de las capitales que obtiene un crecimiento natural más bajo, ocupando la cuarta posición entre las cincuenta capitales españolas.

En cuanto a la natalidad, el estudio encargado por Procasa indica que en todo el ámbito territorial, incluido Cádiz, se intensifica esa marcada tendencia a la reducción de nacimientos a partir de 2006. El descenso del número de nacimientos se debe a que las mujeres tienen cada vez menos hijos y que ha disminuido el número de mueres en edad fértil. Este dato se lleva al extremo en la capital en 2021 que es cuando Cádiz presenta, según el documento, el menor porcentaje de mujeres en edad de procrear de todo el territorio nacional, con un 38,3%, frente al 43,3% de la media nacional que termina dejando ahí a Cádiz como la capital consenso número de hijos por mujer en el período comprendido entre 2014 y 2020.

Al otro lado, en lo referido a la mortalidad, Cádiz capital presenta una mayor tasa de mortalidad respecto al resto de ámbitos territoriales, sin contar el trágico año 2020, en el que la superó Granada por culpa de una mayor incidencia de la pandemia en la tierra de la Alhambra.

Escandaloso resulta el apunte del informe que indica que en Cádiz se intensifica el incremento de las muertes, a pesar de que está perdiendo mucha población, desde el comienzo de la década de 200. Así, desde 2001, la tasa de mortalidad ha aumentado en un 40,8% en Cádiz capital, muy por encima del incremento registrado en el conjunto nacional, donde el porcentaje de fallecimientos se ubica en el 7,4%, y en Andalucía, en un 15,6%.

El informe presentado por Ibermad y Procasa justifican este apocalipsis en la estructura demográfica del municipio, la cual se encuentra muy envejecida, con una población anciana de mayores de 65 años que representa el 24,5% en 2021. Basta observar la pirámide poblacional de Cádiz capital para comprobar que si en España el mayor cohorte de población se corresponde con la edad entre los 45 y los 49 años, en la capital, este grupo mayoritario se encuentra entre los 55 y los 59 años, edades en la que la procreación se convierte ya en algo casi imposible y poco recomendable.

Por distritos, el casco histórico presenta excepciones a esta situación respecto a Extramuros, como el caso de los distritos 3 (Balón y Falla) y 4 (La Viña), que cuentan con las mayores proporciones de ancianos (superiores al 25%). Además, la población anciana del centro está más envejecida con un peso importante de población octogenaria (6,9% en 2021) en gran parte femenina. Por distritos, el casco histórico presenta excepciones a esta situación respecto a Extramuros, como el caso de los distritos 3 (Balón y Falla) y 4 (La Viña), que cuentan con las mayores proporciones de ancianos (superiores al 25%). Además, la población anciana del centro está más envejecida con un peso importante de población octogenaria (6,9% en 2021) en gran parte femenina.

En esta evolución, se observa que la situación ha dado una vuelta de 180 grados, ya que el casco histórico ha ido dejando atrás esa imagen de población envejecida para ganar enteros en un menor índice de dependencia y un mayor índice de reposición respecto a Extramuros, siempre según este estudio de Procasa.

Los autores de este informe justifican este vuelco en los datos en las operaciones de rehabilitación urbana que ha sufrido el casco histórico de la ciudad y el retorno de la población gaditana que durante décadas había desplazado su residencia a otros municipios y que ahora sí se encuentran en centro de la ciudad con viviendas rehabilitadas y con oportunidad de asentarse en los barrios del centro.