Cádiz gana puntos para bajar en 10 años de los 100.000 habitantes
La pérdida anual de población no se reduce y sigue por encima de los mil vecinos
Se confirma el peor dato de los previstos por un estudio del Ayuntamiento sobre el número futuro de vecinos
Cádiz se queda sin niños
Las claves por las que Cádiz pierde población
Pendiente de que el Gobierno apruebe a finales de este mes el padrón oficial de habitantes, que reflejará el número de vecinos que hay en cada una de las más de 8.000 localidades españolas a 1 de enero de 2023, el adelanto publicado por el INE, en base a su propio censo, augura malos tiempos para Cádiz en cuanto a su población.
La verdad es que la ciudad ya lleva tres décadas por la senda negativa cuando hablamos del número de vecinos que la habitan, pero los nuevos datos no permiten ver con optimismo el futuro más cercano.
En un descenso imparable, único en España en lo que se refiere a las grandes ciudades, Cádiz se ha dejado por el camino a 45.000 habitantes, lo que le ha marcado anímicamente y, sobre todo, socialmente.
Vecinos cada vez más envejecidos, descenso alarmante de niños y jóvenes (que son el pulmón futuro de cualquier ciudad), pérdida de usuarios habituales del comercio tradicional (ya muy dependiente del turismo)... Las cifras de población marcan nuestro presente y, a la vez, fijan un futuro a medio y largo plazo nada positivo.
Perder 1.200 vecinos en el último ejercicio de 2022 (el censo de 112.077 ahora conocido está cerrado a 1 de enero de 2023), supone mantener la dinámica de retroceso de los últimos años, con puntas como los 1.549 a la baja de 2016. Eso sí, ya un poco lejos de los 2.000 vecinos menos que se acumulaban año tras año en el final del pasado siglo y el inicio de este, con el récord de 2.466 de 1998.
El ritmo no baja y no hay perspectiva de que se relaje. Las causas son conocidas: vivienda y empleo. Más lo primero que lo segundo. Y si los datos de población han seguido siendo negativos en los últimos años, cuando se ha activado el mercado residencial, a priori no va a cambiar ahora que, a corto plazo, no hay nuevas promociones que puedan estar listas.
Más allá de ello, el parque inmobiliario de la ciudad tiene pocas perspectivas de crecimiento. Los últimos estudios municipales y los elaborados por este periódico reflejan que Cádiz solo tiene capacidad para unas 4.000 viviendas, entre nueva planta y rehabilitación de fincas en el casco antiguo.
Hay que tener en cuenta que quedan en el aire operaciones de calado en el solar del actual Hospital Puerta del Mar (pendiente de que se construya el nuevo complejo sanitario, algo que se puede contar por muchos años) o que se definan más usos inmobiliarios en los terrenos del polígono exterior de la Zona Franca, como va a pasar en Navalips. Todo, eso sí, con una visión más a largo que a medio plazo.
Toda esta oferta será insuficiente tanto para responder a quienes buscan viviendas protegidas como para quienes apuestan por la renta libre, tanto para mejorar su actual calidad habitacional en Cádiz como para retornar a la capital.
Así, no se ven perspectivas de cambio en la tendencia poblacional en negativo de la capital, si acaso algún año que se pueda caer por debajo de los mil habitantes de pérdida. Pero poco más.
Si asumimos como válido este análisis, estamos comprando el segundo de los escenarios que se planteó hace dos años en un estudio elaborado por Procasa.
Malas perspectivas para el futuro inmediato
La empresa municipal encargó un análisis de la evolución de la población. En el mismo se plantearon dos escenarios. Uno, más negativo, asumía una pérdida población a los niveles actuales; otro, más optimista, confiaba en una reducción paulatina de este descenso.
Este segundo fijaba para 2025 una población de 111.789 habitantes: apenas 300 menos que los actuales y a solo dos años vistas por lo que es un dato poco creíble. En 2035, fecha límite del estudio, mantenía a Cádiz por encima de los 100.000 vecinos (108.809), con descensos anuales en los últimos años de 299 personas.
El primero de los escenarios, por su parte, mantenía el ritmo de pérdida actual, con una media entre 1.000 y 1.200 vecinos menos cada año.
Según este planteamiento, dentro de dos años Cádiz habría bajado a 109.215 habitantes, y en 2035 ya habría perdido el nivel de los 100.000, quedándose en 97.651.
En este escenario más negativo en 2035 el 35% de la población residente en la capital habría superado ya los 65 años de edad. Sólo el 10,5% tendría menos de 14 años, y entre 15 y 29 años estaría el 12,58% del vecindario.
Por buscar un dato en positivo, otro estudio elaborado por el propio Ayuntamiento, en este caso junto a la Universidad de Cádiz, y fechado hace una década, cifraba en 105.820 el número de habitantes de la ciudad para 2025. Se tendría que producir una debacle en estos dos años para perder 6.000 habitantes en tan corto periodo de tiempo.
Asumiendo que resulta casi inviable recuperar población, la ciudad y sus rectores deberían de apostar por la mejora de la calidad de sus vecinos (que contados por kilómetro cuadrado nos deja entre las ciudades más densamente pobladas del país). Mejora habitacional, mejora laboral, mejora en la formación. Con suficientes zonas verdes (ahí sigue el Parque Natural desaprovechado) y equipamientos culturales en uso.
En definitiva, una ciudad con menos habitantes pero con una calidad de vida y una capacidad de atracción de visitantes con buenos ingresos económicos, que permitan enriquecer a la ciudad y a sus pocos habitantes.
También te puede interesar
Lo último
CONTENIDO OFRECIDO POR SALÓN DEL MOTOR