Cae el centro cultural en el Rosario de Cádiz: el edificio se dedicará a oficinas

Cádiz no va a contar con dos centros dedicados al arte contemporáneo. La Diputación Provincial ha decidido modificar el uso del antiguo edificio del IES del Rosario para dedicarlo en su mayor parte a equipamiento administrativo de la institución.

El proyecto, anunciado en 2018 como una de las grandes operaciones en clave cultural de la etapa de Irene García, se ha ido topando con el tiempo con diversos problemas estructurales en el edificio, construido hace cuatro siglos para convento de los Agustinos, con varios parones en la obra hasta provocar un cambio sustancial en el plan de rehabilitación.

El proyecto primitivo había obtenido fondos europeos como un referente en la rehabilitación de un edificio histórico introduciendo en el mismo los más modernos sistemas de ahorro energético.

En este sentido, se proyectó una “cubierta evaporativa” con un diseño único que permitía el autoconsumo energético para todo el inmueble.

El inicio de las obras sacó a la luz rápidamente numerosas patologías tanto en elementos de la estructura horizontal como vertical, localizados en los trabajos de demolición incluidos en el proyecto. A la vez, se constató como inviable la instalación de la moderna cubierta ante la deficiencia del elemento portante.

Ante esta situación se liquidó el contrato con la empresa adjudicataria y se optó por replantear toda la operación. En esta nueva visión del proyecto se ha optado finalmente por dejar a un lado el centro cultural y transformar el edificio en un complejo administrativo.

Para este cambio, el actual gobierno de la Diputación ha tenido en cuenta la ya existencia en Cádiz de un centro, en este caso del Ayuntamiento, dedicado al arte contemporáneo, por lo que no parecía lógico duplicar el esfuerzo inversor.

A la vez, se ha valorado el coste que para la administración regional tiene cada año el abono del alquiler de espacios que usa en la ciudad, y que podrán ser sustituidos por el edificio de la calle San Francisco, en pleno centro histórico.

Con todo, se espera que a lo largo del próximo mes de junio haya culminado la licitación de un proyecto complementario al original, centrado en la consolidación estructural del edificio, con la ejecución de refuerzos, con un coste de 662.000 euros y un plazo de ejecución de seis meses, por lo que podría estar terminada esta fase a principios de 2024.

A la vez, se está en proceso de adecuación del edificio como centro administrativo. Se espera que este proyecto esté listo en julio de 2023, con el inicio de las obras en febrero de 2024 y un plazo de ejecución de 18 meses, por lo que si no hay nuevas incidencias el equipamiento estaría en funcionamiento a finales de 2025.

El coste definitivo de la operación rondará los 3,8 millones de euros, un millón más de lo previsto hace cuatro años. Será la propia Diputación Provincial la que asuma la financiación de las nuevas intervenciones no previstas que ahora se ponen en marcha.

El proyecto definitivo definirá el espacio de oficinas y las dependencias que podrán trasladarse al edificio. Igualmente se plantea, inicialmente, acondicionar la planta baja del equipamiento para usos culturales, con la posibilidad de contar con espacios para pequeñas exposiciones o encuentros en el patio del edificio, donde se podrá hacer un cerramiento con una montera ya clásica.

La intención de la Diputación en 2018 era instalar en el Rosario buena parte de las 300 obras contemporáneas que a lo largo de los años fue adquiriendo la institución, creando así una de las más importantes colecciones del sur del país. El plan incluía también una zona de talleres, una tienda, un área para exposiciones temporales y una cafetería.