El CEIP Carola Ribed: un bastión de la escuela pública en Cádiz

Rodeado de centros concertados y asediado por la bajada de la natalidad que pone en riesgo la supervivencia de muchos colegios, se mantiene firme, en la avenida de la Constitución de 1812, el CEIP Carola Ribed. Su buena salud en materia de escolaridad puede considerarse un lujo en los tiempos que corren. No en vano es el único colegio público que ha tenido que baremar para aceptar 25 de las 29 solicitudes en Infantil de 3 años de cara al curso 2023-2024. Esto es, el único de los públicos que ha contado con más demanda que oferta.

El centro ha superado en diez las 19 solicitudes del curso anterior, que supuso un retroceso después de varios años ocupando los 25 pupitres. José Luis Benítez, su director, lleva seis años en el centro, de los que uno ejerció como jefe de estudios, y ahora cumple el cuarto curso en la dirección. “Nos ha sorprendido para bien. Esperábamos mantenernos o bajar un poco, debido al descenso de la natalidad, que más que un problema educativo es ya un problema a nivel social”, indica.

El Carola Ribed cuenta con una línea desde Infantil de 3 años a 6º de Primaria, con 16 profesores en plantilla para atender a alrededor de 220 alumnos. Casi todas las aulas completan el cupo de las 25 plazas, y algunas con 26. La fórmula para mantener estas buenas cifras se basan, según señala Benítez, “en un claustro muy activo y participativo que junto al Personal de Administración y Servicios (PAS), las familias y los alumnos formamos una piña para que todo funcione”. Además, apunta a la “buena relación entre la AMPA y el centro”, con muchas actividades en común, como una de las claves para ofrecer “una buena imagen al exterior”.

Expone el director que “en las jornadas de puertas abiertas participa la AMPA para comentar a las familias lo que ofrece el centro, sus programas y proyectos. Se les explica el funcionamiento y se les aclaran todas las dudas, en un ambiente familiar y coloquial. Salen con pocas dudas y sienten esa cercanía”.

Entre los atractivos del Carola Ribed están decena de actividades extraescolares concretas para cada edad, un huerto ecológico cuidado por dos abuelos del cole con merendero para realizar actividades al aire libre, comedor, una pista deportiva, biblioteca y un pabellón cubierto “que es uno de los activos más importantes del centro”, como bien dice un especialista en Educación Física como José Luis Benítez. El director hace hincapié en que uno de los pilares del centro “es el fomento de la inclusión y la atención a la diversidad, somos un colegio inclusivo al cien por cien”, merced a sus aulas de Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje. Asimismo, destaca que es “el único colegio plurilingüe”.

Además de la labor docente, Benítez concluye que el centro tiene otra prestación fundamental como es el enclave -en el que se encuentra desde 2006 después de décadas muy cerca-, una obra nueva en la llamada zona de Varela, “bien situado entre las dos avenidas, con jardines y parques alrededor, pequeño y familiar, con mucha ventilación y claridad. Y todo esto lleva al boca a boca entre las familias y por eso creo que somos un colegio de referencia”.

El 'nuevo' Carola abrió sus puertas en noviembre de 2006

El nuevo centro se construyó dentro del plan Aula 2000 de la Junta con la colaboración del Ayuntamiento que cedió los terrenos. El colegio nació a la vez que se realizó una reordenación urbanística de toda la zona incluyendo la avenida transversal. Abrió sus puertas el jueves 2 de noviembre de 2006, con el pabellón deportivo sin terminar, después de años esperando y de pelearlo hasta la saciedad la entonces APA (Asociación de Padres de Alumnos). El antiguo colegio se situaba muy cerca, en la calle San Juan Bosco, y fue en primer lugar una planta baja para dos unidades de párvulos. En 1965 se levantó en el solar un edificio de tres plantas y el centro se convirtió en colegio público, donde se educaron muchos niños de la barriada España y de los bloques de Astilleros.