La Casa del Reloj

El Puerto/Las diferentes dependencias de la casa que hoy recorremos se encuentran ubicadas en la calle Cruces con la calle de San Sebastián en el barrio alto de El Puerto de Santa María, cerca de la Prioral,

Esta casa del siglo XVII es conocida como La casa del Reloj por un doble reloj de sol, cuadrante declinante a levante con números arábigos y un segundo cuadrante solar declinante a poniente de numeración romana.

Sus propietarios, el arquitecto Honorio Aguilar y su mujer, la diputada Sol Cruz-Guzmán, apasionados de la arquitectura y del arte, compraron el inmueble hace cinco años. Los dos últimos lo han empleado en rehabilitar la casa e intentar, a través de la recuperación de los elementos originales, que volviera al esplendor de antaño.

La historia, tras investigar su propietario en el archivo municipal y eclesiástico de la Prioral, se remonta al siglo XVII con la tipología de casa de cargadores a India, siendo uno de sus primeros moradores Agustín de Rivera. Luego, en 1702, la casa pasaría a la familia Aguilar, y posteriormente por matrimonio a la familia Báez. En 1859 la adquiere Mariana de Piodella y Tabot, que divide la casa en diferentes viviendas y locales. Tras esta división pasó por tres diferentes propietarios hasta su actuales dueños Honorio Aguilar y Sol Cruz-Guzmán.

La casa tiene una superficie de 850 metros cuadrados repartidos en planta baja, primera planta y una azotea con una alberca, además de un pequeño ático.

El patio es un patio de galería en cuatro lados con originales columnas de mármol negro posiblemente procedente de Markina (Vizcaya) y los arcos de piedra arenisca palomera de la sierra de San Cristóbal. Para el suelo del espacio descrito se ha colocado un suelo de Guijarros seleccionado manualmente en la localidad de Villa del Río Córdoba, a orillas del Guadalquivir. La escalera que comunica con la planta superior de la casa se conserva parcialmente y en su rehabililitación se ha descubierto los arcos de accesos ejecutados en piedra de palomeras originales del XVII. En el rellano de la escalera se conserva parcialmente la contaduría con portada de yesería barroca. En la entre plantas se ha colocado una hornacina con la Virgen de los Milagros patrona de El Puerto de Santa María.

A la primera planta se accede por el portón original de la casa pintado en verde francés. Toda la solería de la galería que conduce a las diferentes estancias de la casa, es suelo hidráulico de finales del XIX. Ha conservado la la viguería de madera del siglo XVII que se conserva en la primera crujía de las dos calles. En cambio, en la galerías del patio se han sustituido la viguería por un nuevo forjado de madera, recuperando el barro original de la tablazón pintado de añil procedente de América.

Las diferentes viviendas de esta planta conservan sus distribución originaldx del siglo XIX. Todas ellas están dotadas con su cocina, baño, salón y dormitorio, combinando los elementos originales con elementos de diseño como son los mecanismos de electricidad del arquitecto portugués Avaro Siza. Para las cocinas de las diferentes viviendas se ha mezclado el suelo porcelánico de gran formato con el friso de los azulejos antiguos de mensaque comprado en El Jueves de Sevilla. En todas las estancias de las diferentes viviendas destaca la alturas de sus techos de más de cinco metros y su viguería que ha sido rehabilitada, luciendo su color original.

En los baños se ha utilizado la cerámica junto a originales lavabos realizados con bebederos y lebrillos fajalauza. En esta plantas una escalera de barro comunica con la azotea y con un pequeño ático.

En la azotea, que cuenta con unas vistas impresionantes a toda la Bahía, la protagonista es la vista de la cubierta de la Prioral. En este espacio se ha colocado una pequeña alberca revestida con mortero de cal y ladrillo de barro reutilizado.

La rehabilitación de esta casa contribuye a la recuperación de una parte del patrimonio del Puerto de Santa María.