La Catedral bate su récord de visitas

La Catedral sigue batiendo récords año tras año en lo que a visitantes se refiere. Hasta ahora, esa cifra máxima se situaba en el balance del año 2017, cuando accedieron a las naves del principal templo de la diócesis un total de 313.398 personas. Y en el año que ha finalizado recientemente ha conseguido superar esa cifra en casi mil personas, sumando un total de 314.163 visitantes. Este dato aportado por fuentes del Obispado reafirma a la Catedral como el monumento más visitado, con diferencia, de la ciudad. Muy por encima del resto de enclaves destacados tanto a nivel religioso como patrimonial y cultural.

Además, los datos de visitas que arroja el año 2019 reafirma el modelo de funcionamiento de este templo que el Cabildo Catedral implantó hace unos años y que posteriormente profesionalizó a través de la empresa ArtiSplendore, que gestiona directamente todo lo relacionado con el régimen de visitas, empleando a una plantilla que suma ya a catorce trabajadores y prestando un servicio que es del todo compatible con el culto propio de una iglesia.

De hecho, este aspecto de abrir la Catedral al turismo al mismo tiempo que seguir celebrando y potenciando –en la medida de lo posible– el culto en su interior es uno de los principales objetivos que desde un principio se ha marcado en este sentido el Cabildo. El arte al servicio de la fe; la valía y belleza de la arquitectura y de las piezas de arte que ocupan capillas y retablos como medio de conectar con Dios.

En paralelo a estas metas que se están consiguiendo no se puede olvidar otro aspecto fundamental: las visitas que se cuentan por una media de 860 personas accediendo cada día a la Catedral está generando unos importantes beneficios económicos que están permitiendo la propia conservación, rehabilitación y mantenimiento del edificio en sí, así como la conservación y restauración del amplio y rico legado patrimonial a base de cuadros, tallas y otras obras de arte que el Cabildo ha legado desde que la sede de la diócesis se estableció en la capital hace ya más de 750 años.

De hecho, el Cabildo mantiene el ritmo de restauraciones, obras y otras intervenciones de mantenimiento que de manera continua y constante se realizan en la Catedral, por lo que esos beneficios que generan las visitas se revierten en el propio edificio que cada año gana visitantes.

Además, no se puede tampoco olvidar que otra parte de esos ingresos que percibe el Cabildo se destina al mantenimiento de ese personal contratado, además de las acciones sociales que de manera puntual acuerdan y entregan los canónigos.

Después de este nuevo récord de visitas, la incógnita se cierne ahora en dónde se situará el techo de visitantes de este templo. Seguramente el incremento experimentado en 2019 vaya en paralelo a ese aumento de turistas que la propia ciudad ha experimentado, principalmente por medio de los cruceros que cada vez en mayor número atracan en el puerto gaditano (una de las principales bolsas de visitantes de la Catedral). Pero no es menos cierto que esta apertura del principal templo de la diócesis a las visitas durante buena parte del día está permitiendo conocer las peculiaridades y riqueza arquitectónica que atesora la Catedral que ideara Vicente Acero y que tiene ciertos espacios –como por ejemplo la cripta– que suponen un gran atractivo cada vez más difundido y buscado entre los foráneos, a lo que también contribuyen las distintas mejoras que de cara al propio visitante ha ido introduciendo la empresa encargada de esta explotación turística del que ha vuelto a reafirmarse en 2019 como el principal atractivo de la ciudad.