La nueva plaza de España dará paso a una inédita visión del puerto de Cádiz
Una vez concluya su peatonalización, el Ayuntamiento planteará otros proyectos de urbanización de la zona del entorno del muelle
Las obras estarán listas el próximo septiembre
El próximo Día sin Coche, que se celebrará el 22 de septiembre, tendrá a la plaza de España como la gran protagonista de la jornada que es, a nivel europeo, la gran apuesta por las ciudades peatonales.
Las obras en la plaza avanzan de acuerdo a los plazos, por lo que estarán ultimadas en fecha. Se cerrará entonces un bucle abierto hace ahora seis años cuando, en un mismo Día sin Coche, se anunció la intención de peatonalizar este recinto, tras lo cual se iniciaron reuniones con colectivos ciudadanos y se organizaron talleres antes de plantear su diseño y ejecución.
El proyecto enfila además su final sin ninguna incidencia ciudadana durante su desarrollo. Como en su día pasó con las obras del soterramiento del tren, se ha visto pasar el tiempo y los trabajos sin disfunciones en el día a día de la capital. Este aspecto lo destaca el teniente de alcalde de Urbanismo y Movilidad Urbana, Martín Vila: "Es la obra de la que más se ha hablado durante su debate y pensada, cuando se plantearon críticas e inquietudes. Algunos elucubraron en el sentido de lo que la ciudad iba a sufrir, que la gente no iba a ir al centro histórico y que el tráfico se iba a colapsar. Pero desde enero para acá ni el tráfico se ha visto afectado ni tampoco nadie ha dejado de venir. El ejemplo es este verano lleno de visitantes".
"De esta forma -constata el edil- se demuestra que con este tipo de intervenciones se mejora la trama urbana y se mejora la calidad de vida, sin generar los perjuicios que algunos adelantaban". La misma alerta se lanzó en la etapa de gobierno del PSOE, con la peatonalización de la plaza de la Catedral, y con el PP, con la misma actuación en la plaza de San Juan de Dios, dos operaciones hoy que serían inimaginables eliminar y que, por el contrario, han creado fortalezas a la ciudad comercial y turística.
A la hora de plantear la peatonalización de la plaza de España se pusieron sobre la mesa diversos objetivos.
Por una parte, recuperar un inmenso espacio urbano, y más con las dimensiones de esta ciudad y del propio casco antiguo, que vivía de espaldas a la ciudad: en una esquina, sin vida vecinal y rodeada de vehículos a modo de una trinchera incómoda, ruidosa y contaminante.
Por otra, se abría la ciudad al pequeño barrio de San Carlos y a un entorno histórico relevante. También se abría una puerta esencial a la zona portuaria, y más cuando parece que ya se impulsa de forma definitiva su conexión con la ciudad y se apuesta por un gran centro de ocio, comercio y cultura en la Punta de San Felipe.
Y todo ello, habilitando un espacio de vida ciudadana hoy inexistente, para lo que será esencial por parte municipal impulsar actividades en la renovada plaza y, también, facilitar su uso lúdico y cultural a otras administraciones y colectivos urbanos.
Pero junto a todo ello, la remodelación de la plaza de España, a la que en septiembre se le podrá hacer un análisis de sus virtudes y defectos (por lo pronto, que no se haya acometido aún la más que necesaria restauración del Monumento a las Cortes, epicentro de este equipamiento), supone dar un paso transcendental y obligado en la reforma urbana de la frontera de Cádiz con su puerto y con su mar.
"La operación que emprendimos en la plaza de España tenía como vocación recuperar la mirada de la ciudad a su puerto, dentro del proceso de integración entre ambas partes de acuerdo con el Plan Especial del Puerto de Cádiz y en un proceso que no se queda en esta plaza, sino que va a ir mucho más allá", declara a este diario el teniente de alcalde de Urbanismo.
En este sentido, se resaltan los trabajos que, mediante fases, se está realizando en la avenida 4 de Diciembre, creando una plataforma única y ampliando el espacio peatonal, incluyendo la instalación de bancos para el descanso de los viandantes, aunque bien es cierto que son numerosos los días en los que coches y furgonetas acaban estacionando en zona ya prohibida.
"Buscamos de esta forma hacer más permeable el paseo de Canalejas y su conexión con el puerto, toda vez que la Autoridad Portuaria ya ha marcado nuevas fechas para las actuaciones en el muelle Ciudad (que se quieren iniciar a lo largo de 2023)", indica Vila que informa del inicio por parte del área técnica de Urbanismo de trabajos para ver cómo se desarrollarán estos trabajos.
En cuanto a la futura plaza de España, se mantiene en líneas generales el proyecto original, aunque se han instalado todas las redes para facilitar la instalación, en una de las esquinas de la Diputación, de una fuente seca, que ejecutará Aguas de Cádiz con fondos municipales en unos meses.
También, según el edil, "se ha protegido a un mayor número de arbolado y de especies vegetales, ampliando alcorques y parterres". La idea es que los jardines se puedan utilizar como espacio de descanso y de estancia, siempre manteniendo el máximo civismo en cuanto al cuidado de la zona verde. También se van a ampliar los parterres que ya se han abierto en la zona de la vía más cercana a las oficinas de la Junta y de la Autoridad Portuaria. La instalación del arbolado busca reforzar la vista principal del Monumento a las Cortes.
El proyecto habilita zonas para la instalación de los distintos contenedores del servicio de limpieza, a la vez que se han renovado todos los servicios de agua, electricidad y telefonía.
En la zona más cercana al colegio público Celestino Mutis también se instalarán juegos infantiles, que podrán ser utilizados por la comunidad escolar, al igual que la de las Carmelitas, igualmente cercana.
Una vez se reabra la plaza de España, donde se pueden utilizar ya pasos peatonales entre las obras, el recinto, pendiente de la futura restauración del Monumento, ya tiene ganado el buen estado en el que se encuentran todas las edificaciones que rodean al recinto: desde el Palacio de la Diputación, a los edificios administrativos de la Junta y el Puerto, a la Casa de las Cuatro Torres y los restantes inmuebles de viviendas, además de la muralla de San Carlos.
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