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Las obras de remodelación de una de las fincas más relevantes de la calle San Francisco en Cádiz, para su conversión en un edificio de apartamentos turísticos, enfilan ya su última fase.
Ya es visible la renovada fachada, que ha mantenido el estilo clásico de la zona, a la vez que se han preservado varios de las columnas de hierro de la planta baja, donde en su interior se ha recuperado el patio central original.
El proyecto lo ejecuta la empresa SIAT Vivienda, que tiene en nuestra provincia numerosas promociones ya ejecutadas o previstas en zonas como Jerez, La Barrosa, El Puerto y Zahara de los Atunes, aunque buena parte de sus actuaciones se centran en Navarra.
El nuevo centro turístico, con 970 metros cuadrados de superficie, se compone de diez apartamentos turísticos repartidos en tres plantas. Además, se ha reservado la planta baja para un local comercial, lo que sin duda animará este tramo de la céntrica calle San Francisco.
El edificio donde se ejecuta este proyecto tiene carácter dotacional dentro del Plan de Ordenación Urbana de la ciudad, lo que le permite este uso turístico. En su día, una promotora gaditana planteó una actuación de viviendas en alquiler que no salió adelante.
La finca ha tenido usos muy diversos en las últimas décadas.
A principios de los años 60 del pasado siglo fue la segunda sede que tuvo en Cádiz Galerías Preciados. La gran cadena comercial fundada por Pepín Fernández, llegó por primera vez a Cádiz en 1958, abriendo una pequeña tienda en el número 7 de Duque de Tetuán. Después pasó a este edificio de la calle San Francisco antes de construir un edificio de nueva planta en la misma calle Ancha, donde permaneció entre 1966 y 1995, cuando la cadena cerró sus puertas. Este grupo acabaría vendiéndose a El Corte Inglés, aunque el edificio de Ancha era excesivamente pequeño al diseño de los centros de la firma comandada entyonces por Ramón Areces.
Tras la salida de Galerías Preciados, el local fue ocupado por la central en Cádiz del Banco Atlántico para, años más tarde, ser sede provisional de los Juzgados de Menores, en una ubicación que obligaba a estacionar los patrulleros que llevaban a los jóvenes ante el juez en plena calle peatonal.
La próxima apertura de este edificio de apartamentos turísticos elimina a uno de los pocos edificios que seguían sin uso en la calle San Francisco. Curiosamente, dos de los que siguen vacíos son propiedad de dos instituciones públicas. Una es la Diputación, dueña del antiguo inmueble del IES del Rosario. Cerrado desde hace años, todo hace prever que el uso que se le dará al mismo, tras varios cambios y una reforma untegral fallida, será el de sede de la Escuela de Hostelería de Cádiz.
La Junta de Andalucía, por otra parte, es propietaria de una finca esquina Valdeíñigo, que fue sede de la Delegación de Trabajo y que lleva años cerrada. Por ahora no hay un uso definido para la misma.
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