El Hospital Puerta del Mar de Cádiz abre un nuevo acceso por la calle Canelo
Sanidad
Avanzan las obras en el exterior de la nueva UCI Pediátrica, que se prevé esté lista antes de fin de año
Arrancan las obras de la nueva UCI Pediátrica del Hospital Puerta del Mar, de Cádiz
Cádiz/Desde hace unos días, pacientes, familiares y personal sanitario disponen de un acceso peatonal más al recinto del Hospital Universitario Puerta del Mar. Se ha habilitado en la calle Canelo, en el tramo más cercano a la Avenida Ana de Viya, derribando parte de la tapia existente. En la entrada, que comunica con la rampa que conduce en primer término a las Urgencias Pediátricas, se ha colocado una superficie pododáctil para facilitar el tránsito a las personas invidentes y un paso de peatones.
Justo al fin de este paso de peatones continúan las obras de la nueva Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) Pediátrica, en este momento en trabajos en el exterior del edificio anexo a una de las alas del principal. Como ya publicó este periódico cuando arrancaron las obras, está previsto que esta actuación finalice este mismo año, permitiendo incrementar su capacidad. Así, frente a los siete puestos y un box semicerrado de la actual unidad, se pasará contar con un área de pacientes críticos agudos con diez puestos (dos de ellos de aislamiento) y un área de cuidados intermedios con cinco puestos para la realización de técnicas de baja sedación, como endoscopias digestivas o broncoscopias.
Esta ampliación supondrá una importante mejora en la asistencia de los pacientes críticos menores de 14 años de toda la provincia de Cádiz, así como de Gibraltar y de la Ciudad Autónoma de Ceuta.
La obra está cofinanciada por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y supondrá una inversión total de más de 2,1 millones de euros.
El servicio se está instalando en la segunda planta del centro, en el espacio que ocupaba la antigua Unidad de Lesionados Medulares, ya trasladada al Hospital de San Carlos de San Fernando. En ese sentido, el cambio de ubicación permitirá no sólo ganar en espacio físico –la superficie total construida pasará de 415 a 816 metros cuadrados–, sino también en elementos de confortabilidad, destacando especialmente el que cada puesto del área de pacientes críticos cuente con luz natural. Además, se modificará la disposición de las camas, con un sistema de control de enfermería central con visualización directa que permitirán vigilar a los pacientes.
La nueva unidad dispondrá también de área de almacenes diferenciados para fungibles, farmacia y equipo electromédico y habrá dos salas de espera en espacios diferenciados: una para pacientes con patología crítica y otra para los padres de niños a los que se les va a realizar técnicas bajo sedación.
Todos los puestos (10 de críticos y los 6 intermedios) contarán con sistemas de monitorización centralizados y el equipamiento para soporte respiratorio necesario, así como todo el material necesario para atender la totalidad de la patología crítica pediátrica (hemofiltros, electroencefalógrafos, entre otras). Además que en el caso de los dos boxes de aislamiento se contará con sistemas de ventilación y climatización independientes del resto de la Unidad, así como sistemas de presión negativa para la asistencia a pacientes con patología infecciosa transmisible.
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