Investigan al restaurante Grimaldi por un delito contra la salud pública
Intoxicación masiva en el Carnaval
El Juzgado de Instrucción nº2 encarga a la Policía Nacional la apertura de diligencias. Los perjudicados en la provincia de Cádiz son 75. Hay otros 30 en Sevilla; cuatro en Málaga; dos en Granada y uno en Jaén.
El caso de la intoxicación a gran escala originada por el restaurante Grimaldi por la venta de productos alimenticios en mal estado ya está en fase de investigación policial.
En el día de ayer, el Juzgado de Instrucción nº2 de Cádiz, dirigido por el juez Miguel Ángel López Marchena, encargó a la Policía Nacional que recabe información sobre lo sucedido el pasado fin de semana en el establecimiento ubicado en la calle Libertad, detrás del Mercado de Abastos.
El juez abre esta investigación tras conocerse el gran número de afectados en hasta cuatro provincias andaluzas. Los últimos datos aportados por la Junta de Andalucía en cifran en más del centenar los afectados entre Cádiz, Sevilla, Málaga, Granada y Jaén. En total son 112 los afectados, de los que 75 de ellos son de Cádiz; 30 de Sevilla; cuatro en Málaga; dos en Granada y uno en Jaén. Los ingresados en Cádiz alcanzaban la cifra de 29.
Concretamente, el SAS detalla que diez personas están ingresadas en el Puerta del Mar de Cádiz, seis en clínica La Salud de Cádiz, cuatro en San Rafael, tres en Puerto Real, cinco en Jerez y uno en Algeciras. La Junta explica que en los casos de los ingresos registrados en Sevilla y Jaén, se debe al mal estado de salud de estas personas y a la alerta desatada, lo que les hizo acudir por precaución a los centros hospitalarios aunque fuera de manera más tardía.
Por su parte, el juez aún no tiene el informe de la autopsia de Rubén Romero, el joven de 26 años fallecido, y hasta el viernes no dispondrá de la analítica que la Junta de Andalucía está realizando para identificar el origen de las intoxicaciones.
Fuentes de la Policía Nacional confirman que en los próximos días se tomará declaración al propietario del restaurante Grimaldi y a la relación de afectados. Las diligencias están encaminadas a conocer si se ha podido incurrir en un presunto delito contra la salud pública. Además, si el informe de toxicología demostrara que la muerte de Rubén Romero tiene causa-efecto con el consumo de un bocadillo en mal estado en el restaurante Grimaldi, al propietario se le investigará por un delito de homicidio por imprudencia.
El letrado de la familia de Rubén, Alberto Masiá, sostiene que ante la presunta vulneración de la normativa alimentaria van a denunciar al propietario del bar. “Nuestra intención es solicitar el auxilio penal en el sentido de que pudiera haber delito de homicidio de imprudencia y otro contra la salud pública. Falta una autopsia definitiva pero la relación causal entre el fallecimiento y la salmonelosis parece evidente”, reconoce el abogado.
Tanto la autopsia del fallecido como los resultados de las pruebas hechas a los alimentos tendrán que esperar. Previsiblemente, tal como anuncia el delegado de Salud de la Junta, Manuel Herrera, el viernes se confirmará si es la bacteria salmonela la culpable de las intoxicaciones. Para ello, el SAS cruzará los datos de los pacientes, algunos ya han dado positivo por salmonela, con los de los productos investigados.
Ante el ruido ocasionado en los últimos días, Manuel Herrera lanzó un aviso para navegantes. “Pedimos responsabilidad a algunas personas que haciendo un uso inadecuado de las redes sociales pueden estar creando una alarma”, reclama.
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