José Javier Macías, Lola Real y Enrique Balestra, los futuribles concejales del PSOE de Cádiz

Fran González elaboró una lista de cara a las elecciones municipales de 2019 en la que reservó los primeros puestos para las que habían sido personas de confianza el mandato anterior, rostros ya conocidos de la política municipal, y abrió la puerta del resto de posiciones para nuevos nombres y perfiles. Era precisamente el número 7 de la lista socialista el que marcaba esta distinción entre experiencia y renovación; y son los números 7, 8 y 9 los que están llamados a tomar posesión como concejales del Ayuntamiento después de que hasta cuatro de los seis primeros nombres hayan resultado fallidos (empezando por el propio González, que no llegó a tomar posesión tras el varapalo electoral).

Tal y como establece el proceso de las administraciones locales, tras la renuncia de un concejal debe tomar posesión el siguiente de la lista presentada a las elecciones. Y en el caso que ocupa al Ayuntamiento de Cádiz, esos son José Javier Macías Fernández, Lola Real Álvarez y Enrique Balestra Rodríguez. Un licenciado en Máquinas Navales y profesor de Enseñanza Secundaria de 41 años, una técnica de Laboratorio Químico de 54 años que trabaja como agente de Medio Ambiente y un graduado social también de 54 años, respectivamente. Siempre y cuando los tres acepten el llamamiento y el resto de convertirse, por espacio de 16 meses, en concejales del Ayuntamiento gaditano.

Según el proceso que marca la legislación, presumiblemente será en el pleno de este mes de enero cuando la Corporación tome conocimiento de la dimisión de los tres concejales, no celebrándose la investidura de los nuevos hasta el pleno siguiente, a priori el del último viernes de febrero, siendo entonces cuando se incorporen con todas las garantías a la política municipal para rehacer un grupo socialista que ha quedado sensiblemente dañado.

Igualmente, el PSOE tendrá que nombrar un nuevo portavoz; responsabilidad que a priori deberá asumir uno de los dos concejales que permanecen con su acta, que además tendrá que decidir si asume o no el régimen de dedicación exclusiva que sí disfrutaba hasta ayer Mara Rodríguez.