Limitar los estacionamientos y los accesos al centro serán las próximas medidas

Cádiz/Impedir el tráfico en determinadas calles no es la única herramienta que va a activar el Ayuntamiento. De forma paralela, se ha redactado ya un borrador sobre la peatonalización que arbitra otros recursos para ir descongestionando de vehículos el interior del casco histórico.

Una de estas medidas va a ser la declaración como "zona de residentes" para todo el estacionamiento en superficie que queda libre en la actualidad en el casco histórico. La medida se refiere al aparcamiento en el interior del casco, no en la ronda de circunvalación; y busca que sólo puedan estacionar allí vehículos los residentes, que tendrán su correspondiente acreditación. De este modo se conseguiría eliminar el denominado "tráfico de agitación", que es el que ocasionan aquellos vehículos que circulan por las calles del centro con el objetivo de encontrar una plaza de aparcamiento libre; si de antemano se ha limitado todo ese aparcamiento disponible solo a los residentes, el resto de conductores no entrarán con sus coches dentro del casco.

Otra medida irá dirigida a las zonas de aparcamiento reservados para la carga y descarga o para las motos. En ambos casos, se busca eliminar al máximo posible ambas condiciones, para evitar ese tráfico por las calles del centro. No obstante, se pondrá mucho tacto en el caso de la carga y descarga, para no afectar al sector comercial u hostelero y facilitar esta labor; eso sí, se propone reducir el horario en que se podrá hacer esas labores al máximo, impidiéndose el estacionamiento en esas zonas durante el resto del día.

Una tercera vía sobre la que ya está trabajando el equipo de gobierno es la instalación de puntos de control del acceso motorizado mediante dispositivos de lectura de matrículas. Esto permitiría que a determinadas zonas de la ciudad sólo accedan aquellos coches que tengan autorización para ello, eliminando considerablemente el tráfico rodado en las calles del casco.

Los dos primeros dispositivos de este mecanismo de control, de hecho, se van a instalar próximamente en las plazas de San Francisco y de Fray Félix, en el Pópulo. Ambos casos se han incluido entre las actuaciones del Plan Invierte aprobadas recientemente. "Es una medida efectiva de control que ya está implantada en otros municipios", explica Martín Vila, que resalta las numerosas denuncias vecinales que se reciben en el Consistorio y que hacen referencia a la carga y descarga en horario fuera del establecido o de vehículos privados que van circulando por vías peatonales. Aspectos que se evitarán con estos mecanismos.

Aunque los dos primeros dispositivos de lectura de matrículas ya están en marcha, el Ayuntamiento ha diseñado un mapa de localización de los distintos dispositivos que hay que instalar para blindar al completo el casco histórico del acceso de esos vehículos que se entienden que no tienen por qué adentrarse en el callejero del centro. Y paulatinamente, conforme la disposición económica o la existencia de planes y ayudas como el Invierte lo permitan, se irán incrementando estos elementos.

Todo ello viene establecido en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible que es del año 2013 pero del que no se ha ejecutado "ni una sola medida", como indica el concejal Martín Vila. También considera el responsable actual de Movilidad que ese documento -que realizó una empresa privada- "adolece de conocer el territorio" y requiere una reorientación de las líneas marcadas; algo que ya ha ocurrido, por ejemplo, con el carril bici, "cuyo diseño que negoció el Partido Popular con la Junta de Andalucía no se correspondía con lo que decía el Plan de Movilidad". Por tanto, el documento se está "adaptando" a las necesidades y realidades de la ciudad actual.