Los bares de La Palma provocan una crisis entre Kichi y su socio de gobierno

La intervención directa del alcalde, José María González, tras la protesta de los hosteleros de la calle de La Palma, que debían reducir los espacios de sus terrazas para cumplir con la ordenanza municipal, ha provocado una crisis en las relaciones entre la formación de González y su socio de gobierno, Ganar Cádiz, a la que pertenece Martín Vila, edil de Movilidad Urbana de la que depende la norma aprobada en 2019 cuyo trabajo queda descalificado, según GC, por la decisión de Kichi.

Tras las protestas de los hosteleros, apoyados por partidos de la oposición y por la patronal Horeca, el alcalde anunció una reunión con los afectados y la elaboración de un plan para las terrazas de La Palma.alcalde anunció una reunión con los afectados y la elaboración de un plan para las terrazas de La Palm

Esta situación ha encrespado a Ganar Cádiz, que ha trasladado a este Diario un malestar profundo, en el que se reconoce como el peor enfrentamiento entre los socios de gobierno en los siete años que llevan al frente del Ayuntamiento, solo similar al que se produjó por el funcionamiento de los Servicios Sociales.

Ganar Cádiz es especialmente dura con el alcalde, que hasta ahora siempre se había salvado, por lo menos públicamente, de las críticas por el trabajo interno del gobierno local.

Así, se reconoce que "no entendemos ni compartimos por qué el alcalde actúa en solitario y vuelve a darle autoridad en este asunto a una parte, a la patronal, sin querer escuchar a los demás colectivos. El espacio para analizar la ordenación de la calle de La Palma o cualquier otro espacio, es la comisión de seguimiento de la ordenanza (en la que están presente diversos colectivos sociales), que ya conocía de esta ordenación, pero a la que el alcalde pese a presidir y convocar nunca ha acudido".

Además se lamenta que se hayan tenido que enterar de la intervención del alcalde "a través de lo publicado por Diario de Cádiz", lo que indica que Kichi no informó directamente a Martín Vila de su decisión de actuar en el conflicto.

Respecto a la calle de La Palma se constata que "desde hace tres años se viene dialogando con Horeca la propuesta misma de ordenación, periodo en el que no han presentado ninguna propuesta que se acoja a la ordenanza, clara intención de dilatar el proceso y por tanto su aplicación. En ese periodo, la misma comisión de seguimiento celebrada el pasado 2 de septiembre pidió que la ordenanza se hiciera cumplir por igual en todos los sitios, y que especialmente se garantizase la accesibilidad universal".

La calle de la Palma se ha ordenado dejando un paso para vehículos de emergencia, dejando accesibles los accesos a vivienda y las ventanas de bajos. "No hay nada más. Esta ordenación se estaba cumpliendo en el tramo de Paraguay a San Félix desde hace años, demostrándose que los bares cumpliendo la ordenanza funcionan. La polémica por tanto surge por la reacción de bares concretos asociados de Horeca, que venían ocupando mas de 120 metros cuadrados y bloqueando la calle entera", se destaca desde la formación.

En su respuesta a la actuación del alcalde y de Adelante Cádiz, Ganar Cádiz se muestra también duro en la respuesta, no cargada de segundas intenciones, cuando afirma a este diario que "que nuestra actuación política diaria en el equipo de gobierno es cumplir con el programa electoral común y participativo con el que nos presentamos a las elecciones".

Se lamenta también que se actúe al dictado de la patronal de la hostelería, afirmando que "no cedemos a la presión de ningún lobby empresarial, y debatimos en los espacios ya creados para ellos donde el tejido social y vecinal de la ciudad participa desde hace 6 años como en igualdad: entidades vecinales, entidades que defienden los derechos de las personas con movilidad reducida, consumidores...".

En este sentido se recuerda que la ordenanza donde se incluye la actuación emprendida en la calle de La Palma "se aprobó en 2019, tras un largo proceso de diálogo en el que todas las partes cedieron, y con el voto favorable del PSOE y el Equipo de Gobierno, alcalde incluido".

"No es una ordenanza de máximos sino de mínimos para garantizar el uso compartido de las calles y plazas, que los más vulnerables pueden transitar de forma accesible por su barrio, pueden acceder a su casa sin pedir permiso al dueño del bar, que pueden abrir la ventana de su bajo sin tener una mesa pegada... y que un servicio de emergencia tiene el espacio suficiente para poder llegar a una urgencia", se concluye desde Ganar Cádiz.