Presupuestos 2020: Un pleno monstruoso

Ayuntamiento de Cádiz

El alcalde cita a Camus para concluir el debate y los ataques y críticas se cruzan entre oposición y gobierno y entre la propia oposición

Kichi adapta el “por qué no te callas” en el “mutéese, señor Ortiz”

El alcalde de Cádiz, presidiendo el pleno celebrado ayer por videoconferencia.
El alcalde de Cádiz, presidiendo uno de los plenos celebrados por videoconferencia. / D. C.

La cosa iba de monstruos. De los monstruos de Albert Camus con que el alcalde concluyó el pleno, de los monstruos que a nivel político todos ven en el grupo de enfrente, y de lo monstruoso que fue por momentos seguir un pleno basado en unas tecnologías que fallaron en exceso.

“Seguiremos luchando en la política a pesar de todos los monstruos”, dijo González como final de su alocución. Monstruos a los que previamente había puesto cara, como el Partido Popular con el que “no vamos a pactar nada” por haberse gastado el dinero público “en mamotretos, pérgolas, gambas y Campari”; o con el PSOE que “se va a la derecha” por abstenerse “como Ciudadanos” en las cuentas con una portavoz “que primero nos obliga a negociar en secreto y luego va a la prensa” retrasando el presupuesto tres meses.

Monstruos por todos lados. Monstruos como Domingo Villero, que en el pleno de este viernes dejó su papel de concejal no adscrito para ser señalado directamente como tránsfuga, en las críticas que PSOE y Ciudadanos dirigieron al alcalde por haber negociado con él los presupuestos (un voto es un voto, que es lo que necesitaba ayer González y su equipo para sacar las cuentas adelante). O como el concejal de Hacienda, José Ramón Páez, señalado por unos números que la oposición considera irreales, inflados y engañosos y por el tono y el discurso siempre especialmente tenso del “concejal anticapitalista de Hacienda”, como lo llamó Juancho Ortiz. O como Lucrecia Valverde, que tuvo problemas con la conexión que motivaron una de las suspensiones del accidentado pleno; “qué podemos esperar de un concejal así”, le espetó Villero defendiéndose del transfuguismo. O como el propio alcalde, sobre el que vaticinó Mara Rodríguez que cuando finalice su mandato “no habrá dejado nada y la gente no recordará la herencia del PP, sino el legado vacío de José María González”.

En este continuo cruce de bombas y acusaciones se desarrolló un pleno corto en su estructura, eterno por momentos por las dificultades técnicas y en el que los números fueron, posiblemente, lo que menos salió a relucir. “Mutéese, señor Ortiz”, le llegó a decir el alcalde al presidente popular (para pedirle que pudiera en silencio su micrófono en la videollamada, al ser interrumpido el alcalde durante su discurso final). Del “por qué no te callas” del Rey emérito al “mutéese, señor Ortiz” en el único rifirrafe directo que hubo durante un debate del que José María González se sabía ganador desde el principio. Y es que los votos “para evitar a los monstruos” que emitieron sus concejales superaron a los votos “en contra de los monstruos” que pronunció el PP. El resto de grupos, en contra de lo que decía Camus, se pusieron de perfil.

El pleno telemático no funciona

Tercer pleno telemático desde que se reactivó la actividad en la Corporación. Y tercera sesión en la que se hicieron patentes los problemas que las tecnologías tienen todavía para desarrollar un debate de esas características, con tantas personas (27 concejales más los técnicos municipales) conectadas a una misma videollamada.

Los problemas para seguir el debate y las intervenciones de los portavoces que iban tomando la palabra eran continuos, hasta que la sesión quedó paralizada al perderse la conexión justo en el momento en que la portavoz de Ciudadanos, Lucrecia Valverde, tenía el uso de la palabra.

“Hay que suspender la sesión hasta que se recupere la conexión”, espetó la secretaria municipal, que ya había avisado al inicio del pleno que cuando se perdiera la conexión con un concejal había que suspender el pleno –al contrario, por cierto, de lo que ocurrió el viernes cuando incluso una votación cambió totalmente de signo por problemas de conexión de la misma portavoz de Ciudadanos en el momento de proceder a votar–. “Es como si alguien se levanta para ir al baño en un pleno normal”, dirigió el alcalde a la secretaria, intentando que la sesión siguiera su curso sin la intervención de Valverde. “En este caso es con carácter involuntario. Tenemos que suspender la sesión porque son problemas técnicos”, le respondió la secretaria.

Este mismo problema se repitió en otras ocasiones durante el debate. Pero pese a todo ello, y pese a que la oposición había insistido en que el Pleno fuera presencial, el alcalde quiso aclarar su postura al final de la sesión: “Es agotador leer en la prensa cómo el juicio de valor de la oposición se queda en el envoltorio. Hacemos el pleno telemático por salud, por la salud de ustedes, la salud de los trabajadores de esta casa, que son responsabilidad mía. ¿No es el formato más cómodo? Vale ¿Que no hay otra opción mejor? Por supuesto. Se garantiza el debate, la democracia, la expresión de todos más allá de algún percance técnico subsanable”.

stats