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Cádiz/Un aspecto importante de este informe es que intenta ofrecer soluciones para acabar "con una situación límite" y pone encima de la mesa una serie de propuestas constructivas "para solventar la situación de colapso".
En la cuestión de personal, en el informe se dice que es "imprescindible" un aumento de personal, principalmente de Trabajo Social para adaptar los requerimientos legales de la Ley de Servicios Sociales de Andalucía. También ha de elevarse el número de profesionales de Psicología y Educación Social, así como personal administrativo. Se deja muy claro que "no se resolverá ningún tipo de colapso sin el aumento proporcional de la plantilla de personal de atención en los servicios sociales comunitarios".
Una de las aspiraciones que tiene el colegio es que los trabajadores sociales deben ser agentes del cambio y no dedicarse en exclusiva a la gestión o tramitación de prestaciones, "puesto que eso no es intervención social".
El Colegio señala en el documento que el aumento de plantilla sin un cambio de modelo de intervención "no procurará cambio estructural, sino temporal, debido a que el asistencialista que actualmente se lleva a cabo cronifica la necesidad y multiplica la demanda".
Así, se afirma que el modelo de intervención al que se aspira "es el centrado en la persona", donde el usuario sea partícipe de la intervención de forma activa. El objetivo es se implique en el proceso y en el proyecto de intervención, reciba toda la información, elija al profesional de referencia y pueda pedir un segundo diagnóstico y lo que hay ahora "no promueve el cambio".
Con respecto a las instalaciones, el centro de servicios sociales comunitarios de la calle Zaragoza "se encuentra en una situación arquitectónicamente de precariedad", además de que no es práctico desde el punto de vista profesional, no es acogedor para las personas que acuden a él y no se adapta a la normativa de movilidad reducida.
Por ello consideran que es "necesario y urgente" remodelar el centro de la calle Zaragoza y revisar las condiciones arquitectónicas y de distribución de los otros centros. Pero sobre todo quieren la creación de uno nuevo en el casco histórico para dividir la atención, procurando que sea en el entorno del barrio de Santa María, el Pópulo o San Juan.
En lo que se refiere a la gestión de prestaciones, el colegio profesional pide que se valore la posibilidad de aglutinar varias prestaciones básicas en un tipo de ayuda única que eliminara "la excesiva carga burocrática". Esto agilizaría el procedimiento, "eliminaría la desmesurada gestión y permitiría dedicar esfuerzos a la coordinación profesional con otras áreas y el proyecto de intervención".
Otra de las ideas que barajan es trasladar la gestión de las prestaciones de vivienda a la delegación correspondiente, dejando a los servicios sociales "la realización de la intervención, el proyecto y la coordinación entre áreas a través del personal de referencia".
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