QiQ y Quentum se trasladan a la calle Sagasta a mediados de junio
Comercio gaditano
Quorum también ampliará de forma considerable su local cuando aprueben la financiación de la obra
El entramado comercial de las principales arterias de la ciudad sigue transformándose, dejando la estela de dos nuevos cierres de emblemáticos establecimientos del centro, que se trasladan a un local común. QiQ y Quentum, del Grupo Quorum, se embarcan así en un proyecto conjunto que emprenderán desde el antiguo local que ocupaba la Librería Alejandría en la calle Sagasta, 26 y que tiene previsto abrir sus puertas a mediados de junio.
Así lo confirmaba ayer Pepe Jaime, copropietario de Quorum Libros, que comentaba que este traslado ha surgido de forma casi casual, al hilo de la obra de ampliación que pretenden realizar en Quorum y que está pendiente de algunos trámites de la financiación. "Estábamos buscando un local para trasladar material cuando la obra afectara a algunas secciones de la librería, vimos éste y nos gustó".
Fue entonces cuando pensaron en trasladar QiQ, "ya que el local nos estaba dando muchos problemas en los bajantes y atascos en los patinillos interiores". Y si a esto se suma que el nuevo establecimiento supone un alquiler más bajo, pues mejor que mejor. "El local de la plaza de Mina es más vistoso, pero una vez que nos hemos metido en esta historia nos hemos dado cuenta de que en Sagasta hay una afluencia de público mayor", esgrimía Pepe Jaime. Además, estamos hablando de un sello consolidado en el sector librero que, con toda probabilidad, mantendrá su clientela habitual. "El circuito no varía mucho, está muy cerca de la calle Ancha".
La incorporación de QiQ en este proyecto viene con la decisión de mantener la cafetería que albergaba el antiguo negocio librero para convertir el nuevo local en centro de presentaciones, firmas o talleres, lo que supondría otro aliciente para el consumidor. "Pero niños y cafetería o este tipo de actividades no nos cuadraba mucho, así que fue cuando decidimos trasladar la librería QiQ, con el consiguiente ahorro de otro alquiler. Estamos hablando de dos alquileres por uno, lo que nos ayudará a sobrellevar el negocio y a no tomar otras medidas de reducción de personal", dice.
El nuevo establecimiento mantendrá el nombre tradicional de ambas librerías, QiQ y Quentum, al disponer de dos entradas diferenciadas por la calle Sagasta y Benjumeda. Está dotado de unos 300 metros cuadrados y tendría una organización del espacio diferenciada, que no rígida, explica el propietario. Tendría una parte infantil, que luego continuaría por la zona juvenil con una sección que hace especial hincapié en el cómic, hasta desembocar en la zona de literatura adulta. Si bien, todo estaría integrado en un mismo recorrido, que se vería modificado en algunos tramos con las campañas estacionales de libros de textos, por ejemplo, o de juguetes en navidad.
En la actualidad el establecimiento de la nueva librería conjunta está en obras. En concreto, se está reparando una serie de bajantes rotos y se están bajando las ventanas que se transformarán en grandes escaparates, con el fin de suprimir las rejas actuales. "Esperamos terminar la obra a finales de este mes, para comenzar a montar estanterías y abrir aproximadamente a mediados de junio. Como fecha tope, a finales de junio".
La crisis, con la búsqueda de espacios más económicos, se ha aliado en esta ocasión con actuales conceptos de librería a los que desde hace un tiempo se agarra el sector, como reclamo y punto de encuentro de nuevos públicos.
En cuanto a las obras de ampliación del tradicional local de la calle Ancha, están pendientes de conseguir financiación para comenzar a acometer las obras. "El proyecto ya está hecho, sólo falta este último trámite para enviarlo al Ayuntamiento", comenta.
El nuevo proyecto incluiría un local de una finca de la calle Cervantes, que ampliaría la librería con más del doble de su espacio actual. Así, de los aproximadamente 500 metros cuadrados que disponen en la actualidad, pasarían a tener unos 1100 metros.
La espaciosa sede de Quorum deja abierta nuevas posibilidades de futuro que pasan desde el mantenimiento de ambos establecimientos de forma independiente, hasta la unión futura en esta sede principal de la calle Ancha. "Aunque todavía es pronto para hablar de nada. Porque si el local de Sagasta funciona, pues no lo eliminaremos", sentencia Pepe Jaime.
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