Reabrir la Casa de Viudas ha costado 4,2 millones de euros

El próximo martes reabrirá sus puertas la Casa de Viudas tras haber sido sometida a una profunda rehabilitación y readaptación que la convierte en una residencia de mayores de 70 plazas y en un centro de día de otras 30. Una intervención integral que según dijo ayer el presidente de la Fundación Fragela, el franciscano José Luis Salido, ha supuesto un coste total de 4.200.000 euros.

En esta cantidad se incluye la rehabilitación del inmueble de la plaza del Falla, que se ha elevado hasta los tres millones de euros -los cuales han sido costeados por la Junta de Andalucía, con 1.800.000 euros, y por la Fundación Fragela, que ha puesto el resto mediante un préstamo hipotecario a 25 años- y el equipamiento total del edificio para adaptarlo a las necesidades de los mayores. En este sentido, Salido explicó que se incluyen tanto las instalaciones técnicas, "como son la energía solar, la cocina, la lavandería, el sistema de calefacción o el toldo que cubre el patio", como el mobiliario. En todo esto último se han invertido 1.200.000 euros, que han sido costeados por distintas entidades, "como la Fundación Carmen Pinillos, la Fundación Comes, Cajasol, el Consejo de Hermandades, la Autoridad Portuaria, el Consorcio Zona Franca y la hermandad del Carmen".

Esta gran intervención en la antigua Casa de Viudas permitirá reaperturar el edificio como centro geriátrico el próximo martes, más de un año después de que hubieran concluido las obras. Sobre esto, el franciscano José Luis Salido precisó que el problema es "el sistema, que ya he dicho que hay que cambiarlo porque no se puede tardar más de un año en abrir un centro social". Junto a ello, se ha retrasado la apertura también debido a la necesidad de ceder un local para instalar un transformador "que va a beneficiar al barrio, no sólo a nosotros", precisó Salido.

Pese a ello, el 26 de noviembre se firmó al fin el concierto de las 70 plazas de residencia que comenzarán a funcionar el martes. Ese día ingresarán en el centro cinco ancianos -curiosamente las cinco primeras serán las que ya vivían en Fragela antes de su cierre para la rehabilitación, cuando había once ancianas de las que ahora van a regresar siete- y a partir de ahí lo harán tres residentes cada día, por lo que en algo más de un mes ya estaría funcionando al cien por cien la residencia de mayores.

Por su parte, el centro de estancia diurna no podrá entrar en funcionamiento, ya que todavía no se ha firmado el concierto de plazas con la Junta de Andalucía, que al igual que con las 70 plazas de residencia va a ser la que determine qué ancianos, según la Ley de Dependencia, son los que ingresan en la Casa Fragela.

Para atender a este centenar de mayores, se ha contratado a una plantilla de 50 trabajadores, todos ellos de la empresa Eulen (salvo el director del centro, Pablo Otero).

La inauguración oficial de Fragela no se hará hasta que todos los residentes estén viviendo allí. En principio, será en el mes de enero, después de Navidades y Reyes, cuando el obispo bendiga las instalaciones de este nuevo edificio.