Tensión ante el Ayuntamiento de Cádiz tras la manifestación de Horeca

Cádiz/Ya acabada la manifestación, silenciosa y pacífica, convocada por Horeca en demanda de ayudas directas y a fondo perdido para sobrevivir durante y después de la pandemia, bajo las Puertas de Tierra se ha sentado un grupo minoritario de manifestantes, la mayoría muy jóvenes, alegando entre cánticos que no quieren ayudas, sino trabajar, y pidiendo incluso la dimisión del presidente de Horeca, Antonio de María.

La organización solo tenía permiso para llegar hasta las Puertas de Tierra, pero ese grupo minoritario, al que luego se han sumado más personas, entre ellos muchos trabajadores del sector y solo algunos empresarios y autónomos, ha decidido recorrer las Cuestas de las Calesas hacia la plaza del Ayuntamiento, hasta donde se ha desplazado la Policía Nacional.

Posteriormente se han concentrado ante la casa consistorial, donde han permanecido hasta pasadas las 13:00 horas, golpeando cacerolas, entonando lemas como "Sin hostelería, Cádiz moriría" y pidiendo al alcalde, "que diese la cara". Allí se han vivido momentos muy tensos cuando algunos de ellos han querido entrar en el edificio municipal. Muchos de los trabajadores que en principio siguieron a este grupo de exaltados se retiraron. "No entiendo qué hacen aquí, cuando es la Junta la que ha impuesto las últimas restricciones", comentaba una trabajadora.

El mismo grupo minoritario de jóvenes exaltados ha recorrido después la calle Plocia y otros puntos del a ciudad como la Plaza de las Flores, obligando por la fuerza a los pocos hosteleros que habían abierto a desmontar sus terrazas. Luego continuaron haciendo lo mismo por otros lugares del casco histórico. La convocatoria de Horeca no contemplaba el cierre de establecimientos, si bien algunos decidieron no abrir sus puertas hoy en señal de protesta.