Adif se hará cargo del sobrecoste de la obra del tren de La Cabezuela de Cádiz

Cádiz/Es difícil, si no imposible, acertar con el presupuesto de una obra como la del trazado ferroviario de La Cabezuela de Puerto Real. Por mucho que sean pocos metros de vía, se han tenido que vencer decenas de obstáculos no sólo burocráticos y administrativos sino también trabas que la naturaleza y la urbanización de los terrenos por los que discurrirá el tren ha puesto por el camino.

A eso se le suman problemas como la quiebra de la primera UTE que se iba a dedicar a la obra o la pandemia, que dejó congelado el mundo entero. El resultado ha sido, en total, más de una veintena de años esperando unos metros de vía que uniera el puerto de La Cabezuela con el trazado ferroviario nacional para que las mercancías llegaran al puerto y salieran del puerto para poder ser distribuidas por el mundo entero. Esto dará como resultado un aumento del hinterland así como del área de influencia del puerto de Cádiz, algo que estaba antes capado y, a veces asfixiado, por culpa de no contar con un tren.

Pero al fin parece una realidad a pesar de esas trabas con las que la obra se va encontrando pero que con la colaboración de administraciones como Adif todo irá para adelante y más pronto que tarde se podrá escuchar por esas tierras puertorrealeñas tan cercanas al segundo puente el pitido de un tren.

Han sido muchas operaciones, intervenciones, problemas, entre los que han destacado cuestiones como las distintas expropiaciones que se han tenido que ir llevando a cabo para que se pudiera a las que se han sumado "accidentes" como el hallazgo de un cable de alta tensión que ha mantenido la obra parada durante varios meses y que ha supuesto un sobrecoste de 1,3 millones de euros. Ahora tocaba ver quién paga esos sobrecostes.

Y para no dejar ningún tipo de duda sobre esta cuestión, el Boletín Oficial del Estado del pasado 21 de diciembre trataba esta cuestión de los sobrecostes que han motivado una serie de adendas más que habituales en obras e infraestructuras como la que se traen entre manos Adif y Puertos del Estado con tal de que Cádiz tenga ese tren que lleva más de 20 años esperando.

Con fecha 23 de diciembre de 2022, se firmó un convenio cuyo objeto consiste en regular las condiciones de financiación por parte de Puertos del Estado y de ADIF de la actuación denominada «Ramal de acceso al Bajo de la Cabezuela. Línea SevillaCádiz», con fecha de publicación en el «Boletín Oficial del Estado», el 27 de febrero de 2023.

En dicho convenio se estableció que el importe total de la actuación ascendía a 33.677.230 euros (IVA excluido), que serían financiados, conjuntamente y en los términos previstos en el Convenio, con aportaciones de Puertos del Estado, con cargo al Fondo de Accesibilidad Terrestre Portuaria, y de ADIF.

Se estableció como aportación máxima exigible a Puertos del Estado 12.801.934 euros (IVA excluido). Por su parte, ADIF financiaría con cargo a sus presupuestos y a las ayudas procedentes del programa FEDER el importe correspondiente a la diferencia entre el coste total de la actuación y la aportación máxima exigible a Puertos del Estado. Dicho importe se estimó en 20.875.296 euros (IVA excluido).

Que, con posterioridad a los antecedentes descritos, ADIF ha informado a la Comisión de Seguimiento del Convenio del presupuesto de inversión actualizado respecto de la estimación incluida en el Convenio, y que asciende a la cantidad de 36.334.010 euros (IVA excluido). Este incremento, de 2.656.780 euros (IVA excluido), responde al aumento en el coste de ciertas partidas con respecto a la previsión inicial, entre las que destacan el pago de expropiaciones y la previsión de liquidación del contrato de la obra principal, además de otras variaciones en partidas relativas a expedientes de gasto y otros contratos de asistencia técnica.

No serán exigibles a Puertos del Estado en virtud de este Convenio cantidades adicionales a las aprobadas en cada momento para la actuación objeto de financiación por el Comité de Distribución del Fondo de Compensación Interportuario que gestiona el Fondo Financiero de Accesibilidad Terrestre Portuaria.

De acuerdo con la programación vigente a la fecha de firma del presente convenio, no será exigible a Puertos del Estado una cantidad superior a los 12.801.934 euros (IVA excluido), que se distribuirá en las anualidades que acuerde la comisión de seguimiento conforme a las reglas establecidas en el presente convenio.

En el BOE se especifica sobre todo el lógico sobrecoste que ha habido que ir añadiéndose a medida que han ido surgiendo las expropiaciones en los terrenos por los que pronto discurrirá el tren. Pero a esto ha habido que sumar el hecho de que se hallara un gran cable de alta tensión que aportaba energía a buena parte del polígono industrial y portuario.

El hallazgo de este cable de alta tensión que cubre las necesidades energéticas de parte del polígono industrial ubicado en la vecina Puerto Real ha provocado unos daños que fueron cuantificados tanto desde el punto de vista económico como en lo que hace referencia a los plazos de la obra.

1,3 millones de euros de sobrecoste y cinco meses de retraso respecto a las últimas fechas facilitadas por el ente Administración de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).

El cable descubierto pertenece a la infraestructura de la compañía Endesa y es esta empresa privada la que se tiene que ocupar, primero de cortar el fluido eléctrico, no sin antes contar con una alternativa para que el polígono no se quede ni un instante sin luz para evitar pérdidas económicas.

Y una vez que se cortara el fluido eléctrico había que pensar en su traslado a otro lugar, ya por alto para que ya no discurriera por el subterráneo del lugar. Toda esta tarea le corresponde ya a Endesa que ha ido llevando los asuntos pendientes con celerirdad.

De esta manera, ahora mismo se puede confirmar que el hallazgo de este cable de alta tensión ha provocado ya una subida del precio de la obra de 1.375.939,5 euros. Y ahora tocaba preguntarse por el ente u organismo que se tendrá que hacer cargo de este dinero.

Según la propia Adif estos sobrecostes no suponen un gran problema porque una obra de esta magnitud suele contar contar con una provisión de fondos para cubrir este tipo de imprevistos. Y, aún así, como la obra se suele ir pagando por certificaciones, nunca será Endesa la que tenga que pagar los platos rotos.

En cuanto al retraso, eso sí que va ya a misa y realmente no se sabe si éste podría ir incluso a más, ya que Adif no sabía aún si la Junta de Andalucía había mandado ya la documentación para su impulso definitivo.

De ahí que ha resultado lo suficientemente esclarecedor lo publicado en el BOE de finales del pasado mes de septiembre en el que se cuantifica la adenda y se aclaraba qué entidades u organismos se iban a hacer cargo de ese aumento de los dineros y el crecimineto del presupuesto necesario para llevar adelante esta obra que debería estar ya en funcionamiento a lo largo de los próximos meses para así dar servicio a las muchas decenas de empresarios que llevan aguardando a ese tren más de 20 años.