El cuadro de la ex alcaldesa Teófila Martínez sigue sin colgar del Ayuntamiento de Cádiz

En medio del revuelo de cambios de calles y derogaciones de hijos predilectos y adoptivos, el cuadro de la ahora presidenta de la APBC sigue sin figurar en la escalera principal consistorial y en Emasa se perdieron los cuadros de los anteriores presidentes, Carlos Díaz y José Blas Fernández

Galería con los retratos de los alcaldes en la escalera principal del Ayuntamiento. / Lourdes De Vicente

Calles y plazas que cambian de nombre; un contrato a terceros para definir qué personaje debe o no seguir recibiendo el homenaje de la ciudad; nombres reconocidos por el Ayuntamiento que pierden el título en su día concedido… El equipo de gobierno mantiene constante su empeño por aplicar -eso sí, bajo el prisma que ellos consideran y que empresas afines certifican en informes que carecen de objetividad y en algunos casos de rigor- la Ley de Memoria Histórica. Pero al mismo tiempo, ejecutan una especie de ley de memoria contemporánea no escrita que mantiene en el olvido a personajes de la política municipal de los últimos años que no aparecen en salones y paredes.

Casi siete años después de que Teófila Martínezabandonara el sillón de la Alcaldía, su retrato aún no puede verse en la escalera de la Casa Consistorial, en cuyas amplias paredes lucen retratos de todos los alcaldes. En algunas ocasiones desde el equipo de gobierno se ha trasladado que estaban a la espera de convocar el oportuno acto y proceder a la colocación de la pintura, algo que se sigue resistiendo en la actualidad.

Y eso que los populares pusieron fácil la gestión de la pintura en sí, porque como recuerda el exconcejal José Blas Fernández, “el retrato se hizo al mismo tiempo que el de Carlos Díaz”. El PP encomendó la pintura del alcalde socialista al pintor Antonio Torres Brú nada más llegar al gobierno de la ciudad, en 1996. “Y Torres Brú se ofreció a pintar también el retrato de Teófila sin variar el precio”, indica José Blas Fernández, reafirmando así que el retrato de la exalcaldesa lleva la friolera de 26 años terminado y en depósitos municipales, sin que hasta la fecha (desde junio de 2015 en que Martínez dejó el cargo de alcaldesa) se haya sumado a la galería de alcaldes “entre los que se encuentra Manuel de la Pinta, cuyo retrato también encargamos nosotros porque no estaba y queríamos que estuvieran representados todos, lógicamente”.

La pintura de Teófila Martínez, que realizó Torres Brú en 1996. / Lourdes de Vicente

A este incidente suman en el PP otro, en esta ocasión en la empresa municipal de aparcamientos (Emasa). En la sala de juntas de la sede situada en la calle Doctor Herrera Quevedo lucían los retratos, también pintados, de los presidentes de la sociedad. Carlos Díaz y José Blas Fernández habían sido los únicos hasta la llegada de José María González y su equipo al gobierno de la ciudad y, con ello, también a Emasa. Y desde entonces, los dos retratos han desaparecido de las paredes. “En tiempos de David Navarro como presidente me percaté de que habían retirado los cuadros; pregunté y me dijo que iban a pintar la sala de juntas y por eso se habían retirado, para volver a colocarlos cuando acabaran estos trabajos”, indica José Blas Fernández; pero a día de hoy, los dos cuadros no han vuelto a colgarse.

El cuadro de la ex alcaldesa lleva pintado, por Torres Brú, desde 1996

Es más, recuerda también el expresidente de la entidad que en la entrada a la sede de Emasa se colocó una placa en recuerdo del día de su inauguración, “porque la sede se adquirió en tiempos del gobierno del PP”, que también han retirado los posteriores presidentes (Navarro o el actual, Martín Vila).

“Que yo sepa, ni Teófila Martínez, ni Carlos Díaz ni yo mismo somos personas a las que aplicar la Ley de Memoria Histórica”, ironiza Fernández, que no entiende los criterios seguidos por el actual equipo de gobierno para borrar de las estancias municipales los recuerdos de los veinte años de gobierno de los populares.

El coste de la revolución del nomenclator

El gobierno local insiste en que todas las decisiones que se vienen adoptando en los últimos plenos relacionadas con cambiar nombres a calles no tienen coste alguno. Pero lejos de ser uno de esos puntos, como tantos, que se aprueban por la Corporación y que luego no llevan a nada, la maquinaria de sustitución del nombre de una vía sí que tiene un coste. Más allá de lo que suponga a nivel burocrático y administrativo la nueva denominación en esas vías donde hay propiedades privadas (viviendas, fincas, locales, terrenos, solares y demás), cambiar el nombre de una vía tiene un coste directo, el de los azulejos de la nueva denominación.

El Ayuntamiento tiene firmado un contrato (formalizado en agosto de 2020) para el suministro de los azulejos cerámicos con nombres de calles, plazas y cualquier otra vía de la ciudad. Contrato que establece un gasto máximo de 2.500 euros anuales en la realización de estos azulejos.

Para fijar los precios, el Ayuntamiento estableció unas tarifas que oscilan entre los 3,63 euros (para cada “azulejo artesanal liso azul, esmaltado y pintado a mano con pintura sobrecubierta con esmalte crudo” de 10x15 centímetros) y los 1.176,12 euros (que costaría un mural cerámico de 90x20 centímetros “esmaltado y pintado a mano con pintura sobrecubierta con esmalte crudo con pigmentos tradicionales, incluyendo el diseño consensuado con la delegación o adaptación a formato pictórico cerámico del diseño propuesto”.

A estos precios, conviene señalar, hay que aplicarle una rebaja del 20%, según la oferta de la adjudicataria. Es decir, entre 2,90 euros y 940,90 euros cada azulejo.

Atendiendo a estas cifras, y teniendo en cuenta que el Pleno de noviembre acordó cambiar el nombre a 29 calles, el coste de tanto baile puede ser considerable. Es cierto que el precio máximo es para un artículo (mural cerámico) que no se incluye, a priori, en el supuesto de nombres de calles; pero al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que el precio mínimo (para el azulejo azul liso de 10x15 centímetros) se referiría a cada letra del nombre de esa calle, plaza, alameda, glorieta y demás espacios incluidos en esta revolución que no es gratuita.

68 Comentarios
Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último