Arranca la obra de las primeras viviendas sociales de Bruno García
El alcalde pone la primera piedra de la promoción de 53 pisos en Marconi destinados al alquiler social junto a la Subdelegada del Gobierno y a la consejera de Vivienda de la Junta
El Ayuntamiento de Cádiz ha puesto este miércoles la primera piedra de la promoción de 53 viviendas que se destinarán al alquiler social. Las primeras viviendas que el actual gobierno presidido por Bruno García gestiona y construye desde su llegada a la Alcaldía en junio de 2023; y las primeras de un paquete de 106 que ya tienen la financiación asegurada y que están en varios momentos del proceso previo al inicio de las obras.
En un acto de colocación de primera piedra al que han asistido la consejera de Vivienda de la Junta de Andalucía, Rocío Díaz; la subdelegada del Gobierno en la provincia, Blanca Flores; la delegada territorial de Vivienda de la Junta, Carmen Sánchez; y varios concejales del equipo de gobierno -ninguno de la oposición-, ha puesto de relieve la concejala de Vivienda del Ayuntamiento de Cádiz, Ana Sanjuán, cómo la ciudad se dispone a dar un nuevo uso a los depósitos "117 años después de que el rey Alfonso XIII colocara la primera piedra". "Los depósitos han estado más de un siglo siendo clave en la industria tabaquera de la ciudad, pero las ciudades y sus necesidades cambian, y donde antes se almacenaban fardos hoy hacemos viviendas", ha relatado Sanjuán en el simbólico inicio de la obra de Procasa, tan solo a unos metros de que ABU esté empezando ya a levantar también su torre de 20 plantas de altura.
Aproximadamente un tercio de ese rascacielos ocupará, en altura, la nueva promoción de Procasa, que destaca por la incorporación de "altas prestaciones energéticas" fruto del apoyo inversor de los fondos europeos Next Generation, por una gran terraza ubicada en la segunda planta para disfrute comunitario, por la existencia de "amplias terrazas" exteriores en las 53 viviendas, que incluyen unas celosías de madera para permitir que los futuros inquilinos puedan tender la ropa sin afear la estética de la vía pública y, con ello, incumplir también una vieja ordenanza gaditana.
El coste de la construcción de esta promoción de viviendas será de 8.822.451,56 euros, de los cuales 2.369.920 llegan por medio de los fondos Next Generation y los otros 6.200.000 euros los financia íntegramente el Ayuntamiento; o, mejor dicho, "los gaditanos con sus impuestos", como ha querido poner de relieve el alcalde, que ha agradecido a la ciudadanía ese esfuerzo para permitir que hoy comience la construcción de estas viviendas destinadas al alquiler social.
El resultado de esta inversión será la construcción de un aparcamiento subterráneo, de un amplio espacio comercial que ocupará todo el bajo y la planta primera, y de un total de 26 viviendas de dos dormitorios y otras 27 de tres dormitorios repartidas entre las plantas 2 y 8. Viviendas que tiene ya totalmente definido el colectivo concreto a las que irán destinadas, según han detallado los responsables municipales de Vivienda. Así, habrá 5 pisos para personas con movilidad reducida; cuatro para personas con discapacidad; 20 para personas mayores de 65 años; otros 20 para menores de 35 años; y las 4 últimas para cómputo general. Todos estos beneficiarios saldrán, en cualquier caso, del registro de demandantes que custodia y gestiona Procasa.
Esa entrega de llaves llegará en un período previsto de año y medio, que es el plazo que tiene ahora la UTE que se va a hacer cargo de la obra, formada por las empresas Construcciones Serrot S.A. y Sardalla Española S.A. Plazo, por tanto, que resta para abrir las puertas no ya a 53 viviendas físicas, sino a "53 oportunidades de empezar una nueva vida", a "53 hogares", como ha puesto de relieve Ana Sanjuán, que ha aplaudido el trabajo de los técnicos y de otras administraciones porque "llegar hasta hoy no ha sido fácil", recordando todo el proceso de cesión del suelo a Procasa, la búsqueda de la financiación, la redacción de los proyectos, la licencia de obra, la licitación... "todo se ha conseguido gracias a personas y entidades que han formado parte del proceso para favorecer una política de vivienda inclusiva y sostenible", ha destacado Sanjuán, que cifra el impacto de beneficiarios de estas 53 viviendas en 250 personas, que serían las que en el futuro vivirán en este nuevo edificio.
Para todas ellas, por ahora anónimas, empieza este miércoles de marzo la cuenta atrás, que coincide también con el período que resta para comprobar la enorme transformación urbanística y de usos que está en marcha en todo ese entorno de los antiguos depósitos de tabaco. Un nuevo espacio que ganará la ciudad para la cultura, el emprendimiento, la acción social... y la vivienda.
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