Esquina del bar Las Palomas en Cádiz.
Esquina del bar Las Palomas en Cádiz. / Julio González

La conversión de locales comerciales en trasteros sigue de moda en Cádiz. En el casco antiguo son numerosos los inmuebles que están encontrando una nueva vida como lugares para guardar enseres, incluso en zonas hasta entonces comerciales y que han tenido hasta hace poco usos para hostelería u otro tipo de comercios.

Uno de los casos llamativo se encuentra en la calle Enrique de las Marinas, en un sitio donde durante mucho tiempo fue famoso por albergar un mítico bar como el de Las Palomas, con sus ensaladillas.

La cervecería cerró en el año 2020, tras los duros primeros meses de la pandemia, y tras una reforma se ha convertido en un local donde se alquilan trasteros.

También se anuncian trasteros en la calle Hospital de Mujeres, donde hasta hace unos años estaba una tienda de muebles Dayca, entre otros ejemplos.

Tampoco se libra de estos cambios la zona de Puerta Tierra. La que fuera la mítica discoteca Las Pérgolas también acoge ahora trasteros, según se anuncia en la web Idealista, donde se alquila uno por 85 euros al mes.

Conversión en pisos turísticos

En esa zona además son ya distintos los locales que hasta ahora albergaban negocios hosteleros que ahora son pisos turísticos. Ya hay varios de estos locales en funcionamiento, como el que se ha ubicado en la calle Brasil esquina con el Paseo donde en su día estuvo el restaurante La Calle del Libre Albedrío.

También funciona un grupo de apartamentos en el Paseo en las inmediaciones de la calle Villa de Parada, sustituyendo en este caso, aunque con un diseño sustancialmente más sencillo, a un asador.

En fase de ejecución de obras muy avanzadas se encuentra la promoción de apartamentos que van a ocupar el amplio local de uno de los restaurantes más históricos del Paseo Marítimo de Cádiz, el Delfín Azul, cuyos propietarios han optado por el cambio de negocio tras décadas de servicio.

Se encuentran también en su última fase de construcción los apartamentos que ocuparán parte del inmenso local de otro emblemático comercio: Electricidad Lora, a pie casi del Paseo en la calle Raúl Calvo y que con el futuro parque que sustituirá al cementerio de la ciudad como vecino. Es decir, una posición muy estratégica.

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