Bruno García vuelve a reivindicarse como el alcalde más social
El alcalde de Cádiz arroja cifras y recuerda proyectos iniciados, o deseados, durante su gestión ante las nuevas protestas de Amigas al Sur o la última fotografía sobre las personas sin hogar
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Bruno García dijo nada más ser nombrado candidato del PP a la Alcaldía de Cádiz que quería ser el alcalde más social. Y esa afirmación le está costando, posiblemente, una mayor exigencia a la hora de atender estos siempre difíciles problemas y también a la hora de ser fiscalizado por los críticos. Exigencia que el alcalde refleja en datos, cifras y recordatorio de proyectos que están en marcha, en proceso, o en el deseo de su gobierno. Este viernes ha vuelto García a insistir en que quiere ser el alcalde más social que ha tenido nunca Cádiz; que lo está siendo ya, de hecho, según las reflexiones que ha compartido.
Esa etiqueta que él mismo se ha puesto se tambalea siempre que llega algún tipo de revés, como este viernes era ver una movilización de Amigas al Sur en la puerta del Ayuntamiento -reclamando de nuevo fondos para sostener el comedor social pese a que ya recibieron hace unos meses la ayuda anual de 50.000 euros que tiene comprometida desde hace varios ejercicios- o una última fotografía que ha sacado la asociación Pro Derechos Humanos y que contabiliza a 127 personas sin hogar en las calles de la ciudad, a las puertas del invierno.
“Nunca tanto recibió y nunca tan pronto”, ha afirmado rotundo Bruno García en relación a Amigas al Sur, ampliando a renglón seguido esta afirmación. “Nunca las entidades sociales de la ciudad recibieron tanto y tan pronto”. “Amigas al Sur es una entidad, pero hay muchas. Y el Ayuntamiento está colaborando con todas, otorgando la misma cuantía a todas. Y como nosotros somos los primeros que no estamos satisfechos, ya hemos anunciado que el próximo año va a recibir un 30% de ayudas, como van a recibir todas”, ha recordado el alcalde, dejando claro que Amigas al Sur no recibirá ningún trato especial respecto a otras entidades sociales que tienen fines y objetivos similares. De hecho, en las explicaciones del alcalde se pone de manifiesto que otros comedores sociales con más trayectoria en la ciudad se van a incorporar ahora a esta ayuda municipal que sí recibe Amigas al Sur desde hace varios años.
En este sentido, ha recordado también García que este año se han incorporado tres entidades sociales nuevas a esas ayudas de 50.000 euros: el comedor de María Arteaga, Alendoy y Tierra de Todos. Y ha recordado igualmente que en 2025 se incorporarán otras dos entidades: Virgen de Valvanuz, para atender su comedor de la calle Santiago; y Calor en la Noche, con la atención a las personas sin hogar y el desayuno diario que ofrecen en su sede.
Con estas incorporaciones, el Ayuntamiento concederá el próximo año 65.000 euros de ayuda a Adacca, Amigas al Sur, Caballeros Hospitalarios, Albor, Cardijn, Fundación Márgenes y Vínculos, María Arteaga, Alendoy, Tierra de Todos, Virgen de Valvanuz y Calor en la Noche. Es decir, once entidades a las que se destinará una ayuda global de 715.000 euros.
“Ya hemos incrementado las partidas respecto a todos los gobiernos anteriores, y en 2025 se volverá a aumentar, lo que demuestra que este Ayuntamiento no deja de incrementar la inversión a las entidades sociales”, concluía a este respecto el alcalde, que ve así reafirmado que está al frente del gobierno más social, “en datos seguro y creo que en cercanía con la gente también”. “Este Ayuntamiento tiene un perfil social al menos superior a los anteriores”, insistía.
El trabajo con las personas sin hogar
Esta reflexión le vale también a Bruno García para la realidad de la calle, de las personas que no tienen hogar, que Derechos Humanos cifra ahora en 127, considerando que desde el Ayuntamiento (cuyas cifras estiman 107, 20 personas menos) no se adoptan medidas suficientes para revertir esta situación. “Imagino que antes tampoco eran suficientes las medidas, supongo que no será porque ahora estamos nosotros, estoy convencido”, ha empezado diciendo García a este respecto, como queriendo contextualizar la crítica sobre la situación del sinhogarismo en Cádiz.
La realidad, a juicio del alcalde, es que “los recursos han crecido” en estos meses que lleva al frente de la ciudad, por lo que “estamos mejor que antes” en este campo. Y para argumentar su afirmación, recuerda proyectos como el de la reforma del albergue (pendiente de iniciar en cuestión de días) que él sigue “sin entender” que nadie en los ocho años del gobierno anterior “se diera cuenta de todas las deficiencias que yo vi el primer día de llegar”; como la mejora de la atención de calle, ampliada ahora a las tardes “por un contrato que licitó el gobierno anterior”; o el albergue de segunda oportunidad que se va a construir en una finca de la calle Soledad gracias a la financiación de la Junta de Andalucía de 1,2 millones de euros; o la ampliación de la campaña del frío “que antes duraba cinco meses y que ahora está activa los doce meses”; o que en lugar de una ampliación de diez camas en la temporada de frío se haya llegado a veinte; o el estudio de incorporar más plazas a las viviendas temporales de la calle Setenil de las Bodegas; o las ayudas económicas a los comedores sociales o a Calor en la Noche, que trabajan con estas personas sin hogar. “Estaremos de acuerdo en que estamos mejorando”, reclamaba García, que no esconde que aún queda mucho camino por recorrer, “pero desde que hemos llegado solo damos pasos hacia adelante”.
Por eso Bruno García vuelve a considerarse el alcalde más social, como asegura que trasladará al Defensor del Pueblo Andaluz en una reunión “que yo mismo he pedido” y a la Asociación Pro Derechos Humanos, que también recibirá (por segunda vez) próximamente. “No vamos a dejar de dar más pasos adelante. ¿Y saben por qué? Porque yo lo quiero así, porque vamos a pasar de tener 22 camas lamentables a 60 o 70, y lo va a hacer este Ayuntamiento porque yo quiero hacerlo”, concluía García.
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