Cádiz no da la espalda al sorteo más esperado del año

Este domingo 22 de diciembre, las ilusiones de millones de españoles estarán enfocadas en el Teatro Real de Madrid, donde se celebrará el tradicional Sorteo de la Lotería de Navidad. En Cádiz, donde nació este reparto de fortuna allá por 1812, las administraciones de loterías han registrado, por lo general, un incremento en las ventas. Y, como suele ocurrir cuando media una desgracia, mucho ha tenido que ver la demanda de décimos procedentes de Valencia, zona del país afectada por una feroz Dana en octubre, en esa creencia de que tras una catástrofe puede llegar un golpe de suerte en forma de millones de euros.

Desde la delegación en Cádiz de Loterías y Apuestas del Estado se precisa que hasta que no se cierre el sorteo no se podrá saber con exactitud cuánto se ha jugado en la capital, “pero se palpa” entre los loteros “una impresión positiva y favorable”, aseguran. Aunque lejos del 6 por ciento de más que se vendió el año pasado con respecto a 2022.

En El Gato Negro, calle José del Toro, se nota que está muy cerca la cita. Es jueves, tres días antes del sorteo, El trasiego es constante. Esta administración se ha labrado una buena fama merced a su trayectoria y, todo hay que decirlo, a la suerte que repartió en el sorteo de Navidad de 2022, con un cuarto y un quinto premio, y sobre todo en el del año pasado, con 24.000 euros en quintos premios (cuatro décimos) y 400.000 del primero (un décimo). De propina, el primero y el tercero del Sorteo del Niño. Uno de sus propietarios, David López, reconoce que estos precedentes han propiciado un incremento en las ventas que casi alcanza un 30 por ciento.

“De Valencia hemos vendido mucho, de la lotería viajera”, admite. En una de las puertas del establecimiento se anuncian décimos de esta zona del levante español. Quedan ya pocos, la verdad.

Loterías Arias es la administración más antigua de la ciudad, fechada en 1935. Dori de la Rosa, gerente, habla de un “leve” incremento de las ventas. “El año pasado se notó más. Fue el año que más vendimos, y aun así no dimos grandes premios”. Pero dice estar “contenta” porque es un poco más que mantenerse. “Desde el verano no hemos parado de vender entre turistas, sobre todo madrileños, de excursiones nacionales” apunta.

Arias ha vendido para este sorteo en torno a los 80.000 décimos (8.000 billetes). Lideran el ránking de demanda los décimos acabados en 13. “Y el 00.000, que tenemos abonado también jueves y sábados. Los acabados en 7 han volado. De Valencia no tenemos, pues no trabajamos lotería viajera”, destaca.

En la administración número 17, llamada El pelotazo, en Callejones de Cardoso frente a Cruz Verde o plaza de Antonio Martín, “se ha vendido un poco más que el año pasado”, según confirma su propietario, Francisco Javier Torres. “El 13 está agotado. Y el 15 o el 69. También los dos números de la casa. 96.174 y 60.196”, relata.

Ayuda a una administración de loterías de Catarroja (Valencia)

La lotería viajera hace buenos amigos, de propietarios de administraciones de todas España que intercambian números. Esta vez se han volcado con una administración de Catarroja (Valencia), arrasada por la Dana. “Le estamos ayudando a vender la lotería entre todos. Pusimos a la venta el 50.930 y ha volado nada más colocamos el cartel que indicaba que el número procedía de Catarroja”, explica.

“No hay mayor satisfacción que solucionar la vida a un cliente de siempre”, dice Torres. No hace mucho El Pelotazo repartió el mayor premio de su historia: fue el primer premio de la Bonoloto, dotado con 1.412.917,67 euros, en el pasado mes de agosto.

En la administración Alba, en la calle Acacias, la Lotería de Navidad “se está vendiendo bien”, en palabras de su propietario, Emilio Paredes. “Calculo que un incremento entre un 7 y un 8 por ciento con respecto a 2023”, apostilla. El 13 lidera la lista de terminaciones más demandadas. “Lo de este número es impresionante, se recibe en julio y se acaba ese mismo verano. Y los acabados en 5 y 7 ya no quedan. Muy demandado también el 24, por el año en que estamos, y siempre se acaba el del barrio, el 69.812”, expone Paredes.

“Antes de ocurrir la desgracia ya tenía yo décimos de Valencia, de intercambio con compañeros de allí, sobre todo de Manises. En la tienda ponemos esos décimos con los nombres de las localidades de procedencia y normalmente los más solicitados son los de Madrid o Barcelona, pero este año han ganado los de Valencia. Ocurrió también cuando el volcán de La Palma, que se vendió mucha lotería de Canarias”, señala.

En Loterías Alba se han despachado “unos 400 décimos de diferentes lugares de Valencia”. El año pasado aquí se vendieron “un montón de pedreas”, que son todos aquellos premios que los niños de San Ildefonso cantan con su tradicional “¡Mil euros!”.

“El domingo no abrimos, y disfrutaré de algo que me apasiona desde pequeño: escuchar el soniquete y seguir el sorteo. Ahora bien, si damos un premio saldré corriendo para la administración para celebrarlo”, concluye. Ojalá se vean por la ciudad muchas carreras como la suya.