La calle Novena de Cádiz pierde fuerza tras el cierre de tres comercios

Cádiz/El comercio está viviendo momentos de cambio en el centro de Cádiz. La pandemia y la marcha de casi la totalidad de las marcas del grupo Inditex fueron un duro golpe para este sector en la capital gaditana al sufrir, por un lado, las consecuencias del parón de toda actividad en marzo de 2020 ante el auge de los contagios y las posteriores restricciones -por suerte, ya olvidadas-, y la pérdida de uno de los grandes atractivos comerciales para los compradores.

Aunque la actividad no se ha perdido, una de las calles situadas en la "milla de oro" del centro de la ciudad ha sufrido en las últimas semanas varios cierres de negocios, lo que ha provocado una imagen inusual al estar normalmente en funcionamiento todos sus espacios comerciales.

Esta es la calle Novena, una vía de apenas unos 150 metros de longitud, que en las últimas semanas ha visto que tres negocios han cesado su actividad. Poco antes del verano, el primero en caer fue la inmobiliaria Llave del Sur, situada en la confluencia con la calle Barrié. Un cartel de "se alquila" anuncia su cierre desde hace unos meses, siendo uno de los establecimientos que más años llevaba en este lugar.

El segundo que ha cerrado sus puertas ha sido la tienda CeX, dedicada a la compraventa de artículos electrónicos de segunda mano. Este establecimiento se encontraba en la esquina entre las calles Novena y Valverde, en donde anteriormente estuvo la tienda de moda Basic, perteneciente a Isi.

Por último, hace unos días tomó el mismo camino el comercio Woopi, situada en el tramo más cercano a la calle Ancha, sustituyendo en este lugar a Kasan.

Esta acumulación de locales vacíos en la calle Novena no es habitual debido a que es una importante vía de paso en el centro, comunicando otros dos lugares de gran movimiento como son Ancha y Palillero. Junto a estos, permanece sin actividad de cara al público, aunque sí está en uso, el antiguo local de Zara Hombre, que sigue siendo utilizado por Stradivarius, también del grupo Inditex, como almacén.

Con todo, siete locales permanecen abiertos al público en la calle Novena. Preside esta vía la única tienda que permanece abierta de Isi, que llegó a este lugar en 1969. En su unión con el Palillero se encuentra Stradivarius, el único vestigio que queda de Inditex en el centro de Cádiz.

Con estas dos enseñas como referentes, la hostelería también se abrió paso hace tiempo en este lugar con las aperturas de Goiko -en donde estaba anteriormente Zara Home- y Más que la Cresta -sustituto de San Wich-. Un estanco y las tiendas de moda Incas Arte Sano y El Nuevo Zoco completan una oferta que parece haber perdido fuerza en los últimos meses tras ser considerada una de las principales vías comerciales de la ciudad.

La comparación con el resto de calles de la "milla de oro" evidencia el bache temporal por el que está pasando la calle Novena. Por ejemplo, la cercana Columela, a pesar del duro golpe de la marcha de Inditex y la cierre de otros negocios, ha conseguido recomponerse. De hecho, en la actualidad solo mantiene cerrados los locales de Zara -el más llamativo, pero, a su vez, el más complicado de colocar en el mercado por su alto coste, que se une a la gran inversión necesaria para su puesta en marcha-, NYX y Oysho.

Por su parte, en la calle Anchahay actualmente hasta siete locales vacíos, aunque con distintas peculiaridades. Por ejemplo, la actividad ha regresado al de Confecciones Lluch, aunque la heladería Martonela solo usa la mitad del espacio desde su apertura a principios de verano. Asimismo, los dos locales de El Siglo -que posteriormente se dividió entre esta tienda y otra llamada Milenium- han sido adquiridos por la propiedad de la tartería Dulcena. De hecho, la actividad regresará próximamente en la tienda de decoración Milenium, en donde se instará este establecimiento de tartas, mientras que El Siglo se pondrá en alquiler.

A la lista de locales cerrados en Ancha hay que unir los de Orange, Alfa, La Barraca y Café&Té. En el lado opuesto, en las últimas semanas se han producido las aperturas de Luxalad -que centra su oferta en las ensaladas en el espacio que ocupaba La Casita de Dalí- y Europound Exchange, un establecimiento de cambio de divisas que ha abierto recientemente en donde estaba la tienda de moda Sandro Ferrone.