La calle Veedor vuelve a abrirse al tráfico
Peatonalización
El alcalde de Cádiz, Bruno García, asegura que esta medida no perjudica "la seguridad" del vecino alumnado del colegio Carlos III
AIG denuncia la apertura al tráfico de la calle Veedor de Cádiz
El Ayuntamiento de Cádiz desmiente a Adelante Izquierda Gaditana: Veedor y plaza Fragela siguen siendo peatonales
Cádiz/El proceso de peatonalización del casco histórico de la ciudad emprendido en los últimos años está siendo revisado por el actual equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cádiz que, según ha informado el alcalde en Junta de Gobierno Local, ha decidido abrir al tráfico la calle Veedor en los próximos días.
Calle Veedor y, también, el tráfico rodado podrá entrar a la plaza del Mentidero hasta el corte donde empieza el colegio Carlos III. En esa intersección se indicará un giro a la izquierda para la calle San Dimas y salir por Santa Rosalía. Además, el giro de Veedor a la calle Bendición de Dios quedará reducido solo para el servicio de taxi.
En palabras del primer edil del Partido Popular, se sigue “garantizando la seguridad del alumnado del colegio Carlos III” pues el tramo de Beni de Cádiz que coincide con la fachada del centro de educación pública seguirá manteniendo su protección y coches y motos continuarán circulando sólo en una dirección.
"En torno a la calle Veedor había problemas relacionados con los taxis, con el comercio, con los usuarios del parking y los vecinos. Muchas personas nos dijeron que había que revisar el trazado que se estaba utilizando en esa calle y, en ese contexto, sí que había una máxima y era garantizar la seguridad de niños y niñas", ha situado Bruno García que ha informado que la velocidad de circulación en Veedor y Beni de Cádiz, "que estará señalizada", será "máximo de 20 kilómetros hora".
Con esta reversión de una calle en los últimos años amable para el peatón, y cuyo proceso de despeatonalización ya fue advertido por Adelante Izquierda Gaditana, el alcalde espera que se solucione la situación de la esquina de la calle Zaragoza con Benjumeda. "Ahí se produce una situación muy compleja, un giro de 90 grados que también genera un problema de seguridad. Es que a veces con la reflexión de que haya proco tráfico en el casco histórico por problemas medioambientales y de ruido, estamos al final metiendo más tráfico en otras calles, como es el caso de Zaragoza", ha opinado.
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