La calle Columela en Cádiz cuelga el cartel de (casi) completo para Navidad

La llegada de nuevas firmas nacionales a la calle Columela pone de manifiesto la revitalización -una más- de la llamada Milla de Oro del comercio gaditano. Son grandes empresas que han apostado por Cádiz y que devuelven el esplendor a esta céntrica vía, la cual muestra mucha variedad desde su confluencia con San Francisco hasta la plaza de las Flores, mediando la ‘interrupción’ de la plaza de El Palillero.  

La última incorporación estará a cargo de la la firma de maletas, bolsos, marroquinería y accesorios de moda PACOMARTINEZ, con tienda ya en Bahía Sur. Ocupará el local en el que estuvo casi 100 años Confecciones Moral (esquina con San Francisco), que posteriormente acogió a la multinacional de bisutería, accesorios y complementos Claire’s y por último a Bimba y Lola, marca de ropa y complementos para la mujer que la pasada primavera se trasladó a la plaza de El Palillero, haciendo esquina precisamente con Columela. 

En los últimos meses esta calle ha recuperado un sector, el textil, que había perdido con la marcha de Zara, Springfield o Massimo Dutti. Principalmente en lo que respecta a moda masculina. Esto ha sido posible gracias al desembarco de Scalpers en el local que ocupó Oysho, de Silbon donde estuvo Tous y de Celopman en el espacio dejado por Desigual. Las tres tienen origen andaluz: Scalpers y Celopman son firmas sevillanas y Silbon tiene su origen en Córdoba. 

Con la apertura de PACOMARTINEZ se vivirá en Columela una Navidad casi completa en cuanto a oferta comercial. Sigue fallando para colgar el cartel de completo el edificio donde estuvo Zara (mujer, hombre y niños) y que el gigante Inditex cerró en 2020. Una finca comercial de tres plantas y unos 1.300 metros cuadrados por la que ha habido algún interés, aunque fallido: una oferta para ocupar el bajo con un comercio y convertir en viviendas el resto de plantas. 

En la calle Columela están ocupados 44 de los 45 locales existentes, incluyendo los tres establecimientos hosteleros: la cafetería Andalucía, el restaurante Nino’s y La Tapería. La mayoría de los negocios son de carácter textil. A los ya citados, las nuevas incorporaciones, se suman Punto Roma, Eutimio. Mecanic (ropa juvenil urbana), Mango, Pepe Pinreles (calcetines), Citees (camisetas), una tienda de moda y zapatería que ocupó el local de Massimo Dutti y Pronovias. 

Hasta cuatro tiendas de ropa interior como Tezenis, Women’secret, Calzedonia e Intimissimi, más la zapatería Payma y el material deportivo de Atleet. Del mismo ramo son la Joyería y relojería Regente, la joyería Mia y Bijou Brigitte. Y coexisten dos tiendas de productos divertidos como Ale-hop y Flying Tiger Copenhagen.

En cuanto a complementos se encuentran Cork O’clock (también decoración), Parfois y Misako.

La telefonía también tiene mucha presencia, ya sea con tres de las grandes operadoras (Movistar, Vodafone y Orange) o con negocios de complementos para móviles como Popmobile, Expressphone y La Casa de las Carcarsas.

Completan la oferta el salón de juegos Columela, la farmacia Herbos, la perfumería Aromas, la tienda de souvenirs, General Óptica, las golosinas de Captain Candy Shop, la ropa de hogar de Tramas, HempclinicSpain (cáñamo y aloe vera) y las gafas de sol de Sunglass Hut. 

Si Columela se encuentra a tope y la vecina San Francisco apenas tiene locales vacíos, además del pleno de El Palillero con la llegada de la franquicia de joyería Miramira al local donde estuvo Game, no se puede decir lo mismo de José del Toro, una calle que la cruza pero que, a pesar de estar en todo el cogollo del comercio del centro, suma muchos espacios sin ocupar.