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Después de verse obligado a cerrar La Tapería de Columela por la pandemia, el hostelero Fran Renda publica ‘La noche que bajamos las estrellas’, una historia de emociones en verso

Fran Renda, con su libro, en la Hemeroteca de Diario de Cádiz. / J. M.
J. M.

05 de septiembre 2021 - 06:00

Cádiz/¿Qué hace un hostelero cuando las restricciones ligadas a la pandemia se llevan por delante un negocio con éxito que lo prometía todo? ¿Como reaccionar cuando todo se hunde a tu alrededor?

Después de tener que echar la baraja de La Tapería de Columela en enero de este año a causa de la clausura de las barras de los bares, tras seis años de muchísimo éxito en ese local, Fran Renda lo tuvo claro:Primero, buscar y encontrar trabajo. Lo segundo, refugiarse en la poesía, ese territorio que venía explorando desde que era niño, y atreverse, por fin, a recopilar sus poemas en un libro tal y como le venían recomendado sus amigos.

De ahí nace La noche que bajamos las estrellas, un libro de iniciación en el complejo y sofisticado mundo de la literatura con el que este administrativo de formación de 46 años, curtido desde muy joven en decenas de barras de bar se adentra a pecho descubierto. Sin títulos, ni academias, ni escuelas que lo avalen. Sin padrinos literarios, sin editorial y sin ningún tipo de complejo ni miedo al qué dirán. “Creo que tengo un don, y lo cultivo”, dice. Presentó su libro hace unas semanas en la Sala Serendipia, acompañado a la guitarra por su amigo José Fernández, de Los Piratas, quien ya ha musicado dos de sus piezas.

Escribo poesía desde que era chico, desde los doce o trece años, cuando le dedicaba poemas a la niña que me gustaba”, recuerda. “Siempre leí mucho y soy un gran admirador de Becquer, de Lorca, de Antonio Machado, de Jorge Manrique y de todos los clásicos... Estos dos últimos años fueron muy complicados a nivel emocional y volví a volcarme en la escritura. Para mí ha sido como una terapia. Empecé a escribir poemas y poemas y llegó un momento en que mis amigos me recomendaron que los recopilará. Y siempre decía:ya lo haré. Conocí a una chica de Jerez, Mónica, que ya se había autoeditado un libro, y me animó mucho. Me armé de valor y me puse a hacer la recopilación. Entré en contacto con Roma García, que es la chica que ha hecho la edición. Y aquí está mi primer libro”.

“Mi libro es como una montaña rusa de emociones que revivo cuando releo un poema”

De momento Fran Renda sólo ha sacado 300 ejemplares, que pretende vender en las principales librerías de la ciudad, pero ya planea sacar una segunda edición para ponerla en Amazon.

“‘La noche que bajamos las estrellas es un libro que cuenta ciento y pico historias autobiográficas en verso. Son experiencias, sentimientos, estados de emoción, altibajos... hablo sobre la noche oscura, sobre el miedo a la soledad, a dormir y no despertar... escribo sobre la tristeza, pero también sobre esos momentos de subidón cuando conoces a alguien que te hace sentir... el libro es como una montaña rusa de emociones que revivo cada vez que releo un poema... la gente de mi entorno dice que les conmueven, por eso creo que va a gustar”, cuenta ilusionado.

"Escribí desde chico, creo que tengo un don y lo cultivo"

“Al principio estudiaba métrica y composición, pero al final me he volcado en el verso libre”, explica este miembro de Poémame, un foro digital en que el sí que se atreve con exóticas estrofas orientales como tankas, chökas y napos y shadormas y en el que acumula decenas de seguidores y de apoyos. “Aunque los clásicos nunca mueren, la poesía se está reiventando continuamente”, asegura.

Fran Renda escribe con el móvil y preferentemente de noche, pero también le brotan versos trabajando, e incluso cocinando con la Thermomix. Y no descarta adentrarse en otros géneros ni escribir para el Carnaval.

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