La capital gaditana también sabe de belenes

Pepe Reyna prepara con mimo una ventana de un lavaero antiguo de Cádiz. Aunque no lo parezca está trabajando en un belén. El municipal, concretamente. En la antigua sede del rectorado de la UCA en la calle Ancha. Este año toca una estampa tan gaditana como una azotea. Pepe lleva desde 1984 inmerso en el noble arte del belenismo, esa tradición que esta semana recibió el respaldo de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta anunciando que se ha incoado el procedimiento para inscribirlo en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Interés Cultural (BIC), con la tipología de Actividad de Interés Etnológico.

Reyna heredó la afición de su abuelo y su hijo José María “se arrimó para aprender”. Los Reyna dirigen la elaboración del belén municipal, un belén de tipo popular. “El nacimiento es una azotea gaditana del siglo XVIII, con las vistas traseras de la Puerta del Mar”, explica José María. “Llevamos desde julio haciendo el belén y más personas trabajando en las representaciones”, apunta Pepe. El nacimiento lo dirigen los Reyna y trabajan además en el mismo Manolo Rodríguez, Paco Morales, Antonio Montero y Paco Jiménez.

José María, único socio fundador vivo de la Asociación Gaditana de Belenistas, a la que el Ayuntamiento encarga este trabajo, ha sido la cabeza pensante de un belén popular con figuras adquiridas, de 32 centímetros de alta, a la empresa Arte Sacro Hermanos Cerrada de Los Palacios y Villafranca (Sevilla), una firma de referencia en el belenismo a nivel andaluz. Las figuras, costumbristas y no hebreas, pasarán a engrosar el valioso patrimonio de la asociación.

Paco Morales preside la asociación. Al hilo del BIC recuerda que “Cádiz es la provincia del Belén, la que más asociaciones tiene como provincia de toda España”. Y admite que “económicamente no supone nada este reconocimiento, pero da prestigio y abre puertas por el hecho de ser un bien protegido”.

Aunque la capital no tiene la producción artesanal belenística de Jerez, El Puerto, San Fernando y Medina Sidonia, así resaltado por la nota de la Junta sobre el BIC la Asociación Gaditana de Belenistas vive “un buen momento”, según señala Morales. “Somos una asociación fuerte, con casi 100 miembros, que es un buen número. Estamos federados a nivel provincial, autonómico y nacional”, apostilla.

No tener un local propio ha jugado en contra de la asociación después de tener que dejar la sede de la calle Santiago. “No podemos acoger actos ni congresos, porque estamos en un sitio, el antiguo rectorado, cedido por el Ayuntamiento”, dice Morales. Pero en el horizonte se vislumbra el asentamiento definitivo del colectivo. El anterior equipo de Gobierno acordó cederles dos bóvedas de las murallas de San Carlos. “Cuando estemos allí el impulso para la asociación será muy importante”, señala ilusionado. Ya han comenzado las catas arqueológicas previas a las obras de adecuación, puesto que se trata, también, de un BIC.

Una de las preocupaciones de esta entidad es seguir difundiendo y enseñando este arte para cuidar una tradición y, sobre todo, captar belenistas jóvenes que aseguren el futuro. Para ello en junio se impartieron dos cursillos de iniciación para 30 personas, de las que seis se han unido ya a la asociación.

El belén municipal se inaugurará el 8 de diciembre, día de La Inmaculada, como es tradicional. Antes, el 25 de noviembre, se celebrará el pregón de la Navidad, que estará a cargo de Mario Payán. Y desde el 15 de noviembre los belenistas abrirán en la calle Ancha el mercadillo donde venderán sus propias escenas, artículos, enseres y figuras para los belenes. “Eso nos ayuda a sufragar los gastos”, destaca Paco Morales. Que son muchos. Pero el resultado final demostrará que habrá sido un dinero bien invertido para mantener viva la llama del belenismo y coronar varios meses de minucioso trabajo.