Los cinco usos descartados en Náutica

Aseguran en San Juan de Dios que el destinar Náutica a viviendas no es una decisión improvisada, una ocurrencia repentina. Ni mucho menos. Lejos de eso, en el Ayuntamiento llevan tiempo analizando qué uso podría tener el destacado edificio del perímetro del casco histórico, situado en un enclave tan atractivo como polémico últimamente (ya saben, frente al Campo de las Balas, a pocos metros de Valcárcel, que mira al Castillo de San Sebastián…).

De hecho, hasta llegar a la conclusión de que el mejor futuro que puede tener Náutica es el residencial, por el camino se han quedado otras opciones que por diferentes motivos no se han visto oportunas en el contexto actual de la ciudad. Hasta cinco posibles usos que han quedado descartados.

El primero, y posiblemente más rotundo, es el uso hotelero, que el Ayuntamiento no contemplaba en ningún momento; entre otras cosas, porque ya se prevé un hotel en el solar del Campo de las Balas y porque se prevé otro junto a Valcárcel, además del cercano Parador.

Otro uso planteado para Náutica es el de acuario, que llegó a presentar ante el Ayuntamiento un inversor que llegó a diseñar cómo sería ese equipamiento vinculado al mar. En este caso, el problema se presentó a la hora de plantear la cesión del edificio, que los inversores querían obtener mediante una concesión temporal y que la Junta tiene decidido a enajenarlo mediante subasta pública.

En el pleno del Ayuntamiento se llegó a aprobar en su momento una moción para requerir a la Junta que el edificio de Náutica se destinara a residencia de estudiantes. Pero a este respecto, desde el gobierno local se considera que actualmente en Cádiz ya hay proyectos en marcha que pueden atender la demanda residencial de los estudiantes; en concreto, se va a habilitar una residencia en la antigua sede de la Escuela de Ingeniería y otra en el polígono exterior de la Zona Franca, que se unirán a las ya existentes, lo que lleva a descartar este uso.

Tampoco se considera necesario que Náutica pase a ser una residencia de mayores, que casi compartiría espacio con la residencia de Matía Calvo que gestiona la Diputación Provincial. Este uso ni ha sido realmente demandado por ningún colectivo, ni en el Ayuntamiento lo ven oportuno.

En último lugar, también se ha planteado la posibilidad de convertir el edificio en un centro comercial; algo que rechaza rotundamente el Ayuntamiento por considerar que puede suponer una clara competencia al comercio local, por defender ese espacio comercial abierto por el que hace años apostó Cádiz y por rechazar también esa actividad en una zona tan señalada como el entorno de la Caleta.

Estos motivos han ido, pues, tumbando cada una de esas propuestas de uso de Náutica; y tras todas ellas asomó la de la vivienda, que es finalmente por lo que se ha decantado el Ayuntamiento.