El contrato de la limpieza de Cádiz suma un nuevo recurso ante el TSJA

Cointer comunica que la última resolución del Tribunal de Contratación ha sido recurrida ante el Contencioso-Administrativo

Cointer ha recurrido de nuevo ante el Tribunal de Contratación, que ha vuelto a dejar en suspenso la adjudicación a Valoriza

Un operario del servicio de limpieza
Un operario del servicio de limpieza / Julio González

El galimatías en el que se ha convertido el proceso de contratación del servicio de limpieza de Cádiz va camino de convertirse en una bobina imposible de deshilar. A los constantes recursos ante el Tribunal de Contratación Pública, que este jueves ha dictaminado una nueva suspensión del procedimiento, se suman los que están siendo elevados ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.

Ha sido la empresa Cointer, la recurrente que ha propiciado esta nueva suspensión del procedimiento que estaba a punto de plasmar la firma del contrato con Valoriza, la que ha vuelto a poner este contrato en manos del TSJA. En esta ocasión, la propia empresa comunica que ha recurrido ante el Contencioso-Administrativo el último dictamen del Tribunal de Contratación, en el que solo estimaba parcialmente sus reclamaciones permitiendo que el Pleno del Ayuntamiento siguiera adelante con su firme propósito de adjudicar la limpieza a Valoriza.

En concreto, ese Tribunal de Contratación emitió dictamen el pasado 29 de agosto, siendo este acto el que ha recurrido Cointer, que pide también al TSJA "la suspensión del procedimiento de licitación que nos ocupa".

Así las cosas, son ya cuatro -al menos- los recursos que se hayan elevado al TSJA y que estén pendientes de un pronunciamiento de ese tribunal. Así, fue el propio Ayuntamiento quien abrió esta vía judicial precisamente por estar en contra de otro de los acuerdos del Tribunal de Contratación que depende de la Diputación Provincial y que daba, en este caso, la razón a Cointer. Esa resolución dio lugar también a recursos interpuestos por la propia Cointer y por Valoriza. Y a esos se suma esta nueva reclamación de Cointer, que deja el contrato de limpieza en un laberinto administrativo y judicial que sigue complicándose en cada paso que adopta el Ayuntamiento.

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