Treinta cruceros visitaron el puerto de Cádiz en el primer tramo de su temporada alta

Las últimas cifras facilitadas por la Autoridad Portuaria y por Puertos del Estado indicaban que el aumento del tráfico de cruceros estaba haciéndose el remolón y estaba costándole arrancar.

A pesar de que nos encontramos ahora mismo en el primer tramo de la temporada alta, este mes de mayo que termina hoy ha dejado una estela de 29 cruceros, a los que habría que sumar la espectacular llegada del súper yate Elysian, propiedad del dueño del equipo del Liverpool, equipo de fútbol británico que milita en Premier.

Así fueron 29 los buques turísticos llegados a la ciudad en sete quinto mes del año 2024. Y eso ha sido así con un total dee nueve días (4,5, 6, 7, 19, 26, 27, 29 y 30 ) con el Muelle totalmente vacío de cruceros, algo que ocurre casi una tercera parte del año aunque no lo parezca en ocasiones.

Así, Los primeros en estrenar mayo fueron el buque L’Austral, Le Champlain, el Oasis of the Seas y el Costa Diadema, en una jornada en la que coincidieron hasta cuatro cruceros en el puerto. Una estampa que se ha repetido días como el 8,9, y 21 del mes con hasta tres barcos atracados al mismo tiempo en el puerto.

En esta lista, los primeros en compartir espacios marítimo fueron buques como el MSC Orchestra –todo un clásico del puerto de Cádiz– y el Aidastella, ambos procedentes de Málaga o el Queen Victoria, que llegaba a la capital gaditana desde Reino Unido.

También coincidieron la misma jornada el Sky Princess, el Mein Shiff y el Arvia, los tres de gran tamaño. El Sky Princess cuenta con una eslora de 329 metros, el Mein Shiff 1 (315 metros), y el Arvia, el mayor de los tres, con 344 metros de longitud.

A su vez, a lo largo del mes de mayo destacaron las visitas que llegaron al puerto gaditano el 21 de mayo, que contamos con la presencia del Seven Seas Splendor, y el Ventura, que salieron desde aquí para Lisboa y el Crystal Symphony, que , de aquí, se fue directamente para Málaga.

Cabe recordar que la estancia del Ventura resultó algo incómoda, ya que algo más de un centenar de sus pasajeros no pudieron bajarse del barco al estar aislados por padecer Norovirus, una enfermedad intestinal contagiosa que les obligo a estar aislados y con el menor contacto posible con el resto de pasajeros y, mucho menos, bajarse a la ciudad.

Durante el mes de junio, la APBC cuenta con recibir a una veintena de cruceros, entre los que destaca la primera escala del Silver Ray, un buque premium que tocará Cádiz en su viaje inaugural.