El ejemplo de Córdoba para el cambio de nombre del Estadio Carranza

Lo que unos ven tan mal, a otros le parece válido. Y mientras unos se agarran a la Ley de Memoria Histórica como última esperanza de que no se produzca el cambio, otros buscan ejemplos similares que refrendan, a su juicio, que ese cambio se puede materializar sin ningún impedimento legal.

Ante la reacción contraria que ha dado en las últimas semanas el anuncio del Ayuntamiento de Cádiz de volver a cambiar el nombre del Estadio para recuperar el apellido de Carranza, la plataforma ciudadana Estadio Carranza (que promueve este cambio desde un inicio) ha pedido "que se respete el procedimiento administrativo iniciado por el Ayuntamiento, a petición del Cádiz CF, y sus posibles derivadas judiciales". Y ello lo hacen en base a una reciente experiencia acaecida en Córdoba, donde el Ayuntamiento optó por algo muy similar a lo que se quiere hacer en Cádiz, salvando así los límites de la Ley de Memoria Histórica.

En Córdoba, el Ayuntamiento procedió en su día a retirar el nombre de la calle a dos personajes vinculados al Franquismo: José Cruz-Conde, de un lado, militar y político considerado uno de los artífices del levantamiento militar en Córdoba; y Conde de Vallellano, que fuera alcalde de Madrid durante la dictadura de Primo de Rivera y ministro franquista. Esas dos vías serían renombradas como calle Foro Romano y Avenida del Flamenco. Pero con las elecciones municipales y el pacto entre PP y Ciudadanos, el nuevo Ayuntamiento dio marcha atrás a estos cambios en el año 2020, renombrando la primera calle como Cruz Conde (sin la referencia al nombre) y la avenida como Vallellano (omitiendo también el título nobiliario).

Con ello, el Ayuntamiento justificaba recuperar el nombre popular de las vías, dejando fuera las connotaciones franquistas. Y así se ha materializado en la capital de la Mezquita estos cambios de calles, que cuatro años después siguen en vigor.

Este ejemplo considera la Plataforma Carranza que es rotundo en relación al plan de denominar ahora al Estadio únicamente como Carranza, obviando el nombre de Ramón; un 'atajo' que este colectivo considera que "respeta la normativa vigente, en especial la Ley de Memoria Histórica", ya que "es posible realizar cambios en la nomenclatura urbana sin vulnerar la Ley de Memoria Histórica, siempre y cuando se realicen con criterios legales claros y justificados".

"En el caso del Estadio Carranza, la estrategia utilizada por el Ayuntamiento de Córdoba podría servir de modelo, dado que la eliminación de los nombres completos en las calles Cruz Conde y Vallellano fue aceptada por la Fiscalía como un cumplimiento válido de la normativa memorialista", concluyen desde esta plataforma ciudadana.

La opinión de la mayoría

Además de este argumento respecto al precedente cordobés, la plataforma quiere acallar las voces contrarias al cambio de nombre del Estadio recordando el sentir de la ciudadanía en los distintos procedimientos abiertos con anterioridad o en actuaciones y campañas llevadas a cabo por la propia plataforma.

Así, en primer lugar recuerdan que el proceso por el que el estadio pasó a llamarse Nuevo Mirandilla apenas contó con un millar de votos, de los cuales solo un 25% apoyaron el nombre que finalmente se decidió y que a día de hoy sigue siendo el oficial. Frente a ese nombre, recuerdan que en el año 2017 "más de 3.000 gaditanos en una primera recogida de firmas en Change.org manifestó su oposición al cambio y su deseo de que siguiera llamándose Estadio Carranza". Y a ese sentir suman una recogida física que aseguran se saldó con 1.200 firmas, las más de 600 voces que propusieron Estadio Carranza "en el proceso de búsqueda de propuesta de nombres, sin que el Ayuntamiento lo permitiera", o en un recuento de votos de su propia dirección, que contabilizan en 1.400.

Al margen de estos argumentos, la plataforma reclama "respeto a los ciudadanos que pensamos distinto a ellos sin entrar en insultos o descalificaciones que entran más en el uso tergiversado y político del asunto". "En la plataforma, y entre los miles de firmantes y apoyos recibidos, hay gaditanos y cadistas de todas las tendencias políticas", aseguran para zanjar el asunto (por ahora).